Freno a Mourinho

Sobre el césped suma ya 101 días invicto, pero fuera del campo de juego Mourinho está empezando a encontrar una resistencia inesperada: la de sus colegas, los entrenadores. Nadie le niega la gran tarea de sus dirigidos en el tiempo que lleva al frente del Madrid, pero es con sus declaraciones polémicas y desafiantes con lo que comienza a tropezar.

Así, el ex técnico del Inter ya acumuló varias críticas de sus compañeros de profesión con apenas diez jornadas disputadas del campeonato local.

A lo largo de la última semana las provocaciones de Mourinho surtieron efecto en Manolo Preciado, entrenador del Sporting de Gijón. "Mourinho no me cae bien y se lo voy a decir a la cara. ¿Quién coño es este tío?", disparó el técnico del conjunto asturiano.

Preciado estalló contra el portugués, después de que el técnico del Real Madrid confirmara sus insinuaciones sobre el regalo del partido del Sporting contra el Barcelona, en la cuarta jornada. Mourinho había denunciado en su momento la rotación del Sporting contra el conjunto catalán y confirmó su postura el último jueves, en declaraciones a la Cadena SER: "Uno no puede regalar un partido. Debe jugar todo al máximo". Y agregó: "A ver si las hace (las rotaciones en el equipo) contra nosotros". Ante las palabras del luso, Preciado explotó: "Si es para que le respondan desde Barcelona, no lo harán, pero si lo dice en serio, es un canalla y un mal compañero".

Ambos entrenadores no podrán compartir la zona de banquillos, ya que Mourinho deberá cumplir dos fechas de suspensión y será reemplazado por Karanka.

Aun así, el cruce dialéctico entre ambos técnicos levantó revuelo entre los entrenadores de la Liga. "Estoy de acuerdo con Preciado. Posiblemente yo habría dicho exactamente lo mismo", aseguró el entrenador del Espanyol, Mauricio Pochettino.

El Real Madrid optó por el silencio y suspendió la rueda de prensa que debía dar Karanka. La idea del líder del campeonato es calmar las aguas, tras el duro cruce de acusaciones de ambos entrenadores en los últimos días.

El incidente con Preciado se sumó a un precoz historial de conflictos entre Mourinho y sus colegas en el campeonato español. Aunque Mourinho todavía no pudo encender la mecha de, posiblemente, el único rival dialéctico que le interesa: Guardiola.

"Yo respondo todo, menos de física cuántica, respondo todo. Si no contesto a Mourinho es porque, realmente, no merece la pena", sentenció Guardiola, confirmando que el show del portugués comienza a cansar a sus colegas.