Más de 160 jóvenes delincuentes logran trabajo en empresas de la provincia

Un nuevo convenio impulsado por la Junta busca más apoyo en el ámbito privado

G. Ortega / Granada

11 de junio 2008 - 01:00

El Plan de Reinserción Laboral de jóvenes y menores de edad sujetos a medidas judiciales está dando un buen resultado en Granada. El programa, cofinanciado por la Junta de Andalucía y el Fondo Social Europeo, ha tenido hasta ahora 161 beneficiarios.

El dato fue revelado ayer por la directora general de Justicia Juvenil de la Junta, María Luisa Cercas, y por la delegada provincial, Begoña Álvarez, durante la presentación de un nuevo convenio de cooperación con la Confederación de Empresarios Andaluces que persigue una mayor implicación de la iniciativa privada en el objetivo de situar a esos jóvenes en el mercado laboral.

Esa implicación, no obstante, ya existe. 43 empresas granadinas han colaborado con la Junta en sus acciones de reinserción laboral con menores infractores. Esta colaboración se tradujo, además, en 37 becas formativas y 102 contratos laborales.

"Es una oportunidad para que las empresas se desarrollen socialmente", expresó el presidente de la Confederación Granadina de Empresarios, Gerardo Cueva, a quien secundó Andrés Navarro, un empresario del sector de la construcción adherido al citado programa que llegó acompañado de dos empleados, ambos con un pasado conflictivo pero ahora con nómina y futuro. "Para mí, eso es una satisfacción personal. Los empresarios queremos ganar dinero, pero también tenemos la oportunidad de ayudar a otros", afirmó Navarro.

El nuevo convenio permitirá a la Consejería disponer en Granada de un censo de organizaciones y empresas que quieran dar soporte a la formación y prácticas laborales de los menores con medidas judiciales y, en su caso, a la formalización de un contrato laboral.

María Luisa Cercas destacó también la importancia de que las administraciones "contribuyamos a darles una oportunidad laboral y a cambiarles la vida a algunas personas" y puso el acento en que en el proceso de rehabilitación y reinserción del joven juega un importantísimo labor su familia. "Las familias deben hablar el mismo idioma que los profesionales de los centros y seguir las pautas que les marquen", aconsejó.

En cuanto al papel de los empresarios, la directora de Justicia Juvenil enfatizó que su papel es "fundamental", porque el trabajo "significa futuro y esperanza para esos jóvenes". El esfuerzo de éstos, añadió, debe ser secundado "por toda la sociedad, que debe colaborar en esta tarea".

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