Luto y desconsuelo en el adiós a la familia fallecida en el accidente de la A-44

Con desconsuelo, incredulidad y mucha tristeza. Así amanecían ayer los vecinos de Güevéjar y Zujaira (una pedanía de Pinos Puente) después de conocer el lamentable accidente que acabó el sábado con las vidas de cuatro vecinos y que hirió de gravedad a dos menores, que todavía están hospitalizados en el Materno Infantil.

El accidente se produjo pasadas las siete de la tarde del sábado en el punto kilométrico 112 de la A-44, a la altura de Albolote. En el vehículo viajaban las seis personas y por causas que aún se investigan se salió de la vía, chocó con la mediana y volcó. Como consecuencia del golpe, fallecieron los cuatro adultos (una pareja y los padres de la joven) y los dos menores -un niño de 10 años y una niña de 11- resultaron heridos graves.

Nada más conocer la noticia la consternación inundó a los vecinos de Zujaira, de donde era el hombre, de 35 años, y de Güevéjar, de donde eran la pareja de este (de 37 años y madre de los dos menores heridos) y sus padres, de 64 y 66 años.

Durante toda la noche del sábado la atención estaba en el Hospital Materno Infantil, donde estaban los dos niños ingresados, uno de ellos en estado grave. Pero en las últimas horas han mejorado y, según fuentes de Salud, los pequeños se encuentran estables dentro de la gravedad y permanecen ingresados en la Unidad de Cuidados Intensivos con politraumatismos y diversas heridas.

El niño fue operado ayer de urgencia por las lesiones que sufrió en la zona abdominal, que lo mantenían en estado crítico tras el accidente, aunque ahora evoluciona favorablemente de sus lesiones.

Mientras las dudas sobre el estado de salud de los menores preocupaban a los familiares, el otro punto de atención era el tanatorio de Albolote, donde se estuvo velando a los fallecidos después de la realización de las autopsias. Por allí pasaron numerosos vecinos para dar el último adiós a la familia.

Después del velatorio, los cuerpos de los fallecidos fueron trasladados a las siete de la tarde hasta Güevéjar. En la iglesia del pueblo se ofició el funeral por los tres vecinos del pueblo, muy conocidos en la localidad y muy queridos por todos. El joven fue enterrado en el anejo de Zujaira.

En ese momento, con la llegada de los féretros a la plaza, se vivieron momentos de desconsuelo y las lágrimas de los familiares y de los vecinos no se podían reprimir. El pueblo entero se volcó en la despedida de sus vecinos además de una forma tan trágica.

Como muestra del luto y el duelo, la alcaldesa del municipio, María del Carmen Araque, dijo que el Ayuntamiento ha decretado tres días de luto oficial y ha suspendido todos sus actos culturales previstos para estos días. En el Consistorio, las banderas ondeaban ayer a media asta en señal de luto.