Los vecinos de Cúllar Vega aprenden a tirar petardos

Cerca de 70 vecinos de Cúllar Vega han realizado este fin de semana un curso de formación que les permitirá seguir participando activamente a partir del próximo año en su tradicional Procesión de los petardos, una fiesta declarada en abril de interés religioso y cultural por la Junta de Andalucía. Tal y como marca la ley, los culleros que quieran participar el año que viene en esta curiosa procesión del Domingo de Resurrección deben acreditarse previamente realizando un curso de consumidor de artificios pirotécnicos para poder manipular los petardos que se le tiran al Niño Jesús Resucitado, del tipo Tró de Bac o 'petardo trueno'. El uso de estos artificios pirotécnicos sólo es posible legalmente si la fiesta es declarada de interés religioso y cultural, como es el caso, y si los participantes reciben la formación necesaria para tirarlos.

Para ello, el Ayuntamiento de Cúllar Vega, en colaboración con la Subdelegación del Gobierno en Granada y la empresa valenciana Cre-V, ha organizado unas jornadas formativas que se han celebrado en la Casa de la Cultura de la localidad. La iniciativa ha tenido tanto éxito que próximamente se volverá a celebrar otro curso similar porque la realización de este curso es obligatoria para todo aquel que el año que viene quiera participar.

Esta tradición se celebra cada año durante la Semana Santa, el Domingo de Resurrección. El día de antes, el Niño Resucitado pasa varias horas en la Casa del Mayordomo (un miembro de la hermandad que va rotando cada año, cargo para el que hay lista de espera). El domingo por la mañana, la imagen del Niño Jesús Resucitado sale en procesión, se hacen las famosas "reverencias" mientras los vecinos tiran petardos.