Espejos del cambio climático
ADEMÁS de ser enclaves de extraordinaria belleza paisajística, las lagunas de origen glaciar representan ecosistemas muy sensibles a los cambios ambientales, que responden con rapidez a las modificaciones del medio que les rodea. Desde hace más de cuarenta años están siendo objeto de estudio por parte de varios grupos de investigadores de la Universidad de Granada que han puesto en evidencia que las lagunas de Sierra Nevada son extremadamente sensibles a anomalías climáticas y a incrementos en la radicación ultravioleta o en las deposiciones de polvo atmosférico.
El debilitamiento de la capa de ozono estratosférico, la emisión de gases de efecto invernadero y los cambios de uso del suelo tienen una gran repercusión sobre las lagunas de alta montaña que se convierten en antenas que alertan y anticipan los cambios que se producen en los ecosistemas. Por ejemplo, en las últimas décadas el avance de la desertificación en el norte de África se ha reflejado en la progresiva fertilización de las lagunas nevadenses ya que las nubes de polvo sahariano se adentran en el sur de Europa transportando partículas y aerosoles capaces de alterar los ciclos biogeoquímicos de los ecosistemas, lo que puede provoca cambios en las comunidades biológicas cuyos efectos se están evaluando.
También te puede interesar
Lo último
CONTENIDO OFRECIDO POR CAJA RURAL GRANADA
Más de 2.800 niños procedentes de 40 centros educativos han participado en el ciclo Caja a Escena promovido por Fundación Caja Rural Granada