Las emociones del arte

La Colección de Arte Contemporáneo de la UGR presenta sus nuevas incorporaciones en 'Emocionario'

1. Panorámica de una de las salas con la obra 'Inner-tube corset-dress' (Marta Konovalov) en el centro y detrás 'Roca de fuego' (de Cornelis Cornelissen), 'Registros de identidad-menbrana  2' (de Cruz Ciudad) y 'Tianguis mexicano' (de Juan Chamizo).  2. El comisario de la exposición Víctor Trejo posa frente a su obra en la exposición, 'Entre sal y plata'. 3. La 'Silla para meditar' de Rafael Santos Godoy.
1. Panorámica de una de las salas con la obra 'Inner-tube corset-dress' (Marta Konovalov) en el centro y detrás 'Roca de fuego' (de Cornelis Cornelissen), 'Registros de identidad-menbrana 2' (de Cruz Ciudad) y 'Tianguis mexicano' (de Juan Chamizo). 2. El comisario de la exposición Víctor Trejo posa frente a su obra en la exposición, 'Entre sal y plata'. 3. La 'Silla para meditar' de Rafael Santos Godoy.
M. De La Corte / Granada

16 de febrero 2011 - 05:00

El arte contemporáneo suele ofrecer ideas nuevas y originales. En la exposición que ayer presentó la Universidad de Granada con las nuevas adquisiciones de su colección hubo varias, pero quizás lo que más llamó la atención fue que Emocionario está comisariada por Víctor Trejo, un estudiante de Bellas Artes de sólo 23 años que ha sido capaz de demostrar que su juventud, entre la calidad y variada obra que se presenta, es sólo un dato anecdótico.

Con la capacidad de un comisario con años de experiencia, la labor de Trejo ha sido al mismo tiempo "enriquecedora y complicada". En sus manos tenía el papel de mostrar al público por qué la Universidad granadina sigue siendo un motor imprescindible en el arte contemporáneo andaluz. Nombres como Asunción Jódar, Isidro López-Aparicio, Miguel Ángel Moleón, Inmaculada López Vílchez, Belén Mazuecos, Antonio Martínez Villa o Ana García López forman ya parte de ese grupo de artistas consagrados a los que cada año se suman nuevos artistas recién licenciados o que siguen estudiando, como es el caso del propio comisario. En la muestra que ayer se abrió en el Crucero del Hospital Real el espectador tiene la oportunidad de ver la obra de unos y otros que formarán parte de la gran colección integrada ya por unas cuatrocientas piezas -entre cuadros y escultura- pero que son en total 3.500 si se le suman las carpetas de grabado o las fotografías.

La Colección de Arte Contemporáneo, que en la actualidad dirige Francisco José Sánchez Montalbán, comenzó en el 2001 gracias al esfuerzo de Francisco Fernández Sánchez, fotógrafo y profesor de la Facultad de Bellas Artes. Ahora que cumple diez años, el público puede ser testigo de las últimas obras que han sido incorporadas a lo largo de 2010. Se trata de 34 obras que proceden de los premios Alonso Cano de Creación Artística para Estudiantes Universitarios y las donaciones hechas por artistas diversos, la mayoría de ellos profesores de la Facultad de Bellas Artes.

Si hay una característica que destaca en el Crucero del Hospital Real que acoge la exposición Emocionario es el equilibrio a pesar de la diferencia. Todas las obras, ya sean de profesores o alumnos, tienen su espacio protagonista.

Comienza el recorrido con la propuesta colorista e icónica de las Conexiones de Aída Inés Florido y A la mínima señal de Javier Leal Moreno para luego pararse a lo largo del pasillo central en historias o leyendas simbólicas como la de Los chupetes de Hurbert Caño, Un colibrí de amor entre los dientes de Miguel Carini, Memoria muerta de Blas López Fajardo o Canon Femina de Inmaculada López Vílchez.

Los acordes del video de Fito Conesa Música de Cámara inundan toda la sala. Al darle la vuelta el espectador a la pantalla se encuentra con la obra de mayores dimensiones, una interesante pieza de hierro cubierta de letras que, como un tobogán, ha dejado escapar piedras pizarras. El fluir de las ideas, de Mariló Entrambasaguas, es la puerta de acceso a un nuevo espacio con la obra de López-Aparicio, Mazuecos, Jódar, Moleón, Martín Noguerol o Trejo. En este, destaca la videoinstalación Presencias invisibles, no lugares, de Antonio Martínez Villa, una obra que propone a una misteriosa figura que parece andar tras una enorme sábana blanca observando al espectador y que invita también a seguir mirando la 'escultura' hecha con material reciclado de Marta Konovalov Inner-tube corset-dress, los fantásticos personajes de Ninfa y faunos de Juanjo Guarnido, disfrutar de la tranquilidad recomendada por Rafael Santos con Silla para meditar o ser zarandeado por los protagonistas de la obra de Salvador Triviño, Emilio Iguaz y Franceso Pio Chierici; por la de Cruz Ciudad o por el video de Manuel Pérez de Guzmán Bajo la tinta. Agresivas o pacíficas, soleadas o tormentosas, fantásticas y reales, todas las emociones se dan cita en esta exposición que precisamente ha escogido el título de Emocionario para aglutinarlas. Sánchez Montalbán explica que es un conjunto muy variado de ideas y emociones en un solo compromiso que propone "una experiencia artística brillante".

stats