Educación cierra siete unidades en concertados con el curso en marcha

Granada/Las patronales de educación concertada CECE y Escuelas Católicas han confirmado el cierre de al menos siete unidades en sus centros una vez iniciado el curso escolar. Se trata de una medida de la Delegación territorial de Educación, que de esta manera 'ajusta' el número de matrículas en estos centros a las unidades necesarias para la escolarización de ese alumnado.

Desde CECE confirmaron el cierre de dos unidades de Bachillerato y dos de Secundaria en los centros Ave María y en el Juan XXIII de la capital granadina, mientras que Escuelas Católicas anunció señaló otras tres unidades afectadas, también en centros concertados de la capital granadina, sin especificar cuáles son. Desde la Delegación de Educación se explicó sucintamente que estos cierres "ocurren tras la comunicación por los centros de unidades sin alumnos", una circunstancia que, añaden "ocurre iniciado el curso".

Para el responsable regional del CECE, Leandro García, este tipo de medidas obliga a los centros a reagrupar a los alumnos. Se ha llegado a dar el caso de reagrupar a los chicos en otro centro, ante la supresión de una unidad, una circunstancia que, sin embargo, no se ha dado este curso en la provincia.

A nivel de las plantillas docentes de estos centros, García explica que también se ven obligados a un reajuste. "Si se tiene la opción" se recurre a prejubilaciones, "pero si no es posible", se recurre a los despidos. En este sentido, el responsable en Andalucía de la patronal CECE señala que cuentan con una "bolsa de empleo" a la que estos profesores pueden acceder para intentar su recolocación. García añade que por cada unidad que desaparece, se pierde un profesor y medio.

No es la primera vez que Educación 'retoca' el mapa educativo una vez iniciado el curso para ajustar el número de unidades. En 2012 se procedió al cierre de unidades en seis centros concertados, fundamentalmente de la capital y también de Baza.

Todo indica que los ajusten seguirán. El próximo mes de enero se abre el proceso para cerrar el próximo plan de conciertos, que podrá extenderse durante seis años en el caso de Primaria, en lugar de cuatro como hasta ahora, gracias a la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (Lomce). La normativa, además, permite que se acuerden conciertos no sólo por necesidades de escolarización, sino por la demanda social. La previsión de la patronal es que antes de mayo se cierre el proceso de planificación, que previsiblemente supondrá una modificación del número de conciertos a causa de la bajada de la natalidad de los últimos años.

La proximidad de la apertura de este procedimiento ha hecho que las plataformas vinculadas a la defensa de la educación pública, como Marea Verde, PAEP o Padei, y sindicatos tanto de docentes como de estudiantes ya se hayan movilizado en la calle para exigir a la consejera de Educación, Adelaida de la Calle, que repercuta en los centros concertados los recortes que, aseguran, sufre la pública en los últimos años. La consejera, en pleno del Parlamento de Andalucía, aseguró que no habrá nuevos conciertos y sólo se resolverán favorablemente aquellos conciertos para garantizar la escolarización.

En la capital, el peso de los centros concertados es muy relevante. Suponen, según un estudio realizado por el sindicato Ustea, el 58% de las unidades de Infantil, el 62% de las de Primaria y el 64% de Secundaria.