La peor racha con Lucas se produce antes del momento clave

El equipo pierde por primera vez dos partidos seguidos con él, que son tres si se cuenta la Copa

Tito tapa a Benzema en una acción del partido del pasado sábado.
Tito tapa a Benzema en una acción del partido del pasado sábado. / Efe
Javier Aguilera

09 de enero 2017 - 02:37

Granada/Va a llegar el Granada al decisivo encuentro del próximo domingo contra el Osasuna, que se jugará en el Estadio Nuevo Los Cármenes a las seis y media de la tarde, en su peor momento desde que Lucas Alcaraz se hizo cargo del equipo. Lo dicen los resultados y lo evidencian las sensaciones que transmiten los rojiblancos.

La derrota sufrida el pasado sábado ante el Real Madrid por 5-0 en el primer encuentro disputado por los nazaríes en el recién estrenado 2017 ha servido para certificar la peor racha de marcadores desde que Alcaraz cogió al Granada en la séptima jornada.

Pese a la dificultad del calendario afrontado desde entonces por los rojiblancos, el Granada no había caído nunca en más de un partido seguido esta campaña con Alcaraz, hasta ahora.

El traspié ante los blancos se une al sufrido en el último compromiso de Liga del 2016 contra la Real Sociedad (0-2). Si también se tiene en cuenta la derrota cosechada en la vuelta de Copa del Rey contra el Osasuna (2-0), que costó la eliminación en esta competición, el mal momento se alarga a tres partidos perdidos seguidos.

No sumar ningún punto en las dos últimas jornadas ha dejado al Granada en la penúltima posición de la tabla, aún a tres puntos de una permanencia que sigue marcando el Valencia, que esta noche cierra la jornada con el partido que le va a medir al Osasuna.

El resultado del choque que va a medir a los dos rivales directos de los rojiblancos por la permanencia determinará cómo queda la zona de descenso. Un triunfo de los navarros en el primer partido tras la destitución de Joaquín Caparrós llevaría al Granada de nuevo a la última posición de la tabla, mientras que todo lo que sea que el Valencia puntúa, alejaría aún más a los nazaríes de la salvación.

Con todo, las miras del cuadro de Alcaraz van más allá y sólo están puestas en el choque del domingo contra los osasunistas. Todo lo que no sea sumar en ese choque la segunda victoria del curso sería dar un paso atrás crucial en las opciones de permanencia.

Pese a que los granadinos llegan al choque vital en su peor momento del curso, los resultados de los otros equipos que pelean por bajar en estas dos últimas jornadas han sido favorables para los intereses del cuadro de Lucas Alcaraz.

Las derrotas del Sporting de Gijón y del Leganés, que siguen a tres y siete puntos respectivamente de los granadinos en la clasificación, demuestran que estos dos equipos también están en una crisis de resultados y que, si no mejoran, van a ser hasta el final dos rivales directos en la pelea por no bajar.

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