El Circo Encantado conquista Granada y amplía su temporada: un espectáculo que une tradición y magia

El Circo Encantado ha hecho historia en Granada. Desde su llegada, el espectáculo ha superado todas las expectativas, llenando cada función y agotando las entradas a un ritmo vertiginoso. Tal ha sido la respuesta del público que el circo ha tenido que prolongar su estancia hasta el 20 de octubre, dos semanas más de lo previsto, para dar cabida a la enorme demanda. Los payasos Paute y Capitano, junto con el elenco completo, celebran este éxito rotundo con gratitud y alegría, destacando la conexión especial que han logrado con la ciudad.

“La gente de Granada se está portando muy bien”, comentan los payasos Paute y Capitano, quienes lideran el espectáculo. “Desde el primer día hemos estado llenando, y eso es increíble. El público aquí tenía muchas ganas de circo, y lo han demostrado asistiendo en masa a cada una de nuestras funciones”. Para ellos, la magia del circo ha logrado traspasar fronteras y romper barreras, especialmente en una época en la que los espectáculos familiares compiten no solo con otros eventos en vivo, sino con la vasta oferta de entretenimiento digital.

El éxito del Circo Encantado no es casualidad. Este espectáculo ha logrado diferenciarse al combinar lo mejor de la tradición circense con un toque moderno, adaptado a los tiempos actuales. “Somos un circo de toda la vida, pero diferente”, afirma Capitano. Bajo su carpa no solo se encuentran los clásicos payasos y malabaristas, sino que se teje una historia envolvente que se desarrolla en una mansión encantada, con personajes que conectan de inmediato con el público. “El espectáculo tiene la esencia del circo, pero va más allá. Hay una trama, un mensaje que la gente capta, y eso lo hace muy especial”, añade Paute.

Para los creadores del Circo Encantado, el boca a boca ha sido su mayor aliado. “Nuestra mejor publicidad es el público. La gente que viene al espectáculo sale tan contenta que lo recomienda a otros. Eso ha hecho que tengamos que ampliar dos semanas más, porque muchas personas se quedaron sin poder entrar”. Granada ha demostrado ser un terreno fértil para este tipo de entretenimiento, y la conexión entre la ciudad y el circo ha sido casi instantánea. “La mejor señal de que estamos haciendo bien nuestro trabajo es ver colas de gente queriendo entrar y saber que no hay entradas suficientes para todos”, subrayan con orgullo.

Uno de los elementos que hace destacar al Circo Encantado es su capacidad de adaptación e improvisación. Aunque el espectáculo tiene una estructura definida, los artistas son expertos en modificar pequeños detalles en función del tipo de público que asiste a cada función. “No es lo mismo actuar para un público lleno de niños que para uno con más adultos. Adaptamos nuestro humor, nuestro lenguaje, y eso hace que cada espectáculo sea diferente, incluso cuando el guion es el mismo”, comenta Paute.

Capitano agrega que esta capacidad de improvisación no solo se refiere a la interacción con el público, sino también a la inclusión de temas locales que ayudan a conectar con la gente de cada ciudad. “Por ejemplo, en Granada incluimos algunas referencias locales que han estado en boca de todos, y la gente se sorprende al ver que también somos parte de su actualidad”.

El elenco también destaca el valor de la espontaneidad y el respeto hacia el público. “El espectáculo es orgánico, no es algo milimétrico. Cambia con el ambiente, con la energía que sentimos de la gente. Y eso, para nosotros, es lo que hace que cada función sea especial”.

Una familia que se fortalece en cada ciudad

La vida en el circo no solo implica estar juntos durante las presentaciones, sino también compartir el día a día como una gran familia itinerante. Paute y Capitano, junto con artistas de diversas nacionalidades, forman una pequeña comunidad que aprende y crece con cada parada. “Es como un barco”, dice Paute entre risas. “Todos viajamos juntos, aprendemos de las diferentes culturas de nuestros compañeros. Aquí tenemos gente de Ucrania, de Portugal, de Venezuela, y cada uno trae algo diferente. No solo compartimos el espectáculo, sino también nuestras vidas”.

Este ambiente familiar se refleja en el escenario. Los payasos, el corazón del circo, logran crear un vínculo especial con el público que va más allá de las risas. Paute lo explica con humildad: “Hacer reír es lo más difícil que hay. Puedes estar mal ese día, pero cuando te pones la nariz de payaso, todo desaparece. Estás ahí para transmitir alegría, y eso es lo más bonito”.

Un espectáculo para todas las edades

Aunque tradicionalmente el circo se ha asociado con los niños, el Circo Encantado ha roto ese esquema al ofrecer un show que disfrutan tanto grandes como pequeños. “Mucha gente piensa que el circo es solo para niños, pero nosotros hemos logrado que tanto los padres como los hijos salgan felices. Eso es precioso”, comenta Capitano. La clave, según él, está en saber conectar con ambos públicos al mismo tiempo: “Lanzamos bromas que los niños entienden, pero también otras para los adultos. Al final, el padre y el hijo se ríen juntos, y eso crea un recuerdo inolvidable”.

Con una temporada exitosa en Granada y las entradas agotadas en varias funciones, el Circo Encantado ya se prepara para su próximo destino, Almería. Sin embargo, los artistas aseguran que la huella que deja Granada es especial. “Esta ciudad nos ha dado tanto que siempre la recordaremos con cariño. Cada ciudad es diferente, pero lo que hemos vivido aquí es único”, afirman con emoción.

El mensaje final es claro: “Que la gente venga a vernos, porque no sabemos cuándo volveremos. Este es un espectáculo diferente, y queremos que todos tengan la oportunidad de disfrutarlo”. El Circo Encantado seguirá sorprendiendo, divirtiendo y emocionando a quienes crucen sus puertas hasta el 20 de octubre, ofreciendo un espectáculo que, como bien dicen sus protagonistas, “es para todas las edades”.