El Ayuntamiento de Motril elimina árboles de una calle de Playa de Poniente para dar accesibilidad a un residencial

Las protestas realizadas por vecinos de la Playa de Poniente para instar al Ayuntamiento de Motril a que cumpliese la ley de accesibilidad y derribasen un muro que permita a los vecinos del residencial contar con un buen acceso en caso de necesitar a los servicios de emergencias pasan de largo del Consistorio motrileño que, apenas dos semanas después de finalizar sus reivindicaciones, da carpetazo al asunto retirando los árboles ornamentales de la calle para ganar espacio y acabar con los problemas de accesibilidad.

Desde primera hora de la mañana las máquinas trabajan en la calle Plátano de Indias para retirar todos los árboles ornamentales ubicados en seis alcorques para así ganar espacio y permitir que, en caso de necesidad, vehículos de mayor tamaño puedan acceder sin problemas.

Una solución que no gusta a los vecinos del residencial que llevan dos décadas reclamando que se encuentre una solución por la falta de acceso derribando el muro de un establecimiento colindante para ganar unos metros en la calle. Reclaman al Ayuntamiento el retranqueo del muro existente, que separa la urbanización de los propietarios colindantes, para de esa forma hacer el vial más ancho, ya que actualmente no puede acceder vehículos sanitarios o de bomberos.

Sin embargo, desde el Consistorio, que han declinado hacer declaraciones al respecto, aseguraron al inicio de las protestas que estaban sorprendidos por estas después de haber llegado a un acuerdo con los propietarios y la intermediación del Defensor del Pueblo Andaluz, a petición de los mismos vecinos, un acuerdo que la presidenta del residencial negaba haber aceptado.

"En el acuerdo, se priorizó garantizar la seguridad de los residentes, lo que incluye la eliminación de seis alcorques existentes sin afectar al acerado y así proporcionar más espacio en la calle", señaló el teniente de alcalde de Desarrollo del Litoral, Nicolás Navarro. 

El plan contempla una segunda fase, en la que se estudiará la posible apertura de la Calle Plátano de Indias y su conexión con la Carretera de la Celulosa. Por último, en una tercera fase, se realizaría una evaluación técnica sobre el desarrollo urbanizable del sector, en el cual está implicado un promotor privado, siendo este el responsable del desarrollo en el que se incluye un nuevo vial de segundo sentido.

La urbanización fue construida hace veinte años con un vial de único sentido, condicionado a la ampliación y desarrollo urbanístico, aspectos que dependen exclusivamente del promotor privado.