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Álvaro Romero
Tono alcista
Bajo la luz de la luna y en presencia de una leve brisa marinera, miles de granadinos y foráneos se han acercado hasta las distintas playas de la Costa Tropical para celebrar con alegría y al compás hipnótico del fuego, de una de las noches más esperadas del año, que sirve como pistoletazo de salida a la época estival: la noche de San Juan. Una cita en la que las tradiciones de mojarse los pies a medianoche, lavarse la cara, e incluso, los más atrevidos, darse un baño en la playa, se entremezclan con la quema de apuntes en fogatas particulares, el deseo de nuevos comienzos, o los cada vez más populares farolillos, no han faltado. Aunque como viene siendo habitual, la jornada empezaba horas antes en una jornada de sol y playa digna de los meses fuertes del verano.
Una cita que se ha vivido de forma muy especial en la costa granadina que desde última hora de la tarde veía como por los principales accesos el volumen de coches era mayor que en otras jornadas por la cantidad de gente que ha optado por bajar a la playa para disfrutar de las hogueras o alguna de las fiestas organizadas, aunque no en la misma medida que otros años que ha coincidido con el inicio del fin de semana.
Adri, Pedro, Mariana, Carmen y Lucía son cinco amigos de Granada que han decidido pasar la noche de San Juan en La Herradura después de todo un fin de semana de relax y playa. Llevan varios años bajando a distintos puntos de la Costa para pasar estos días, aprovechando que los padres de Carmen tienen una segunda residencia en Playa Granada. "Nos bajamos el viernes por la tarde y hemos estado principalmente en Motril, junto al Hoyo 19, que es donde veraneamos siempre, pero dijimos de cambiar esta noche porque aquí nos juntamos con otros amigos y la playa está muy bien", confiesa Carmen.
No muy lejos de allí, varios niños juegan y hacen carreras para ver quién llega primero al agua. El calor de todo el día ha hecho mella, y la mejor forma de refrescarse es darse un buen chapuzón.
Los vecinos y visitantes que decidieron pasar la jornada en la playa de San Cristóbal tuvieron una visita sorpresa. Aunque la festividad se celebró con la misma euforia que en otros rincones del litoral, a media tarde los que estaban cerca de la orilla vieron con sorpresa como una moto acuática, algo que año tras año denuncian públicamente, daba vueltas cerca de la orilla sin importar la prohibición de acercarse tanto. Al rato, un helicóptero de la Guardia Civil interceptaba a los ocupantes y les obligaba a desembarcar en la orilla.
En Almuñécar los vecinos es tradición pasar la fiesta bajo sus 'chambaos’, mientras se refugian del relente y comen, entre otros manjares, unos bollos de San Juan. Un grupo de amigos de toda la vida de Almuñécar se reunen en la playa de Puerta del Mar para disfrutar de la noche alrededor de una barbacoa. "¿Quieres un pinchito o prefieres una morcilla?", pregunta uno de ellos mientra echa las viandas al fuego. "El próximo año ya sabes dónde tienes que venir para pasar San Juan, a la carpa de Los Pastores, solo tienes que buscar este toldillo", añade mientras señala a la carpa que tienen montada para protegerse del relente, mientras asegura que llevan utilizandola desde hace 20 años.
Unos metros más allá, un grupo de jóvenes se alborotan para pedirle una foto a la mascota con forma de oso que acompaña siempre al cantante granadino Saiko. Se ha trasladado hasta la playa almuñequera para repartir octavillas publicitando el 'Algarete Fest', el festival de música urbana que habrá próximamente en Motril.
La Costa ha dado el pistoletazo de salida a un verano al que le tenía muchas ganas con una noche para el recuerdo marcada por la magia del fuego, el olor a mar en la piel de los valientes que han optado por darse un baño, y multitud de risas y sonrisas con sabor a nuevos comienzos.
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