Los pescadores de la Costa de Granada realizan una parada biológica

Motril/Pocos meses después de realizar una parada biológica, los pescadores del Puerto de Motril vuelven a dejar a la flota de arrastre amarrada en la dársena granadina para que los caladeros descansen, y respetar así el tiempo de reproducción de varias especies que se pescan en la zona.

Una situación que los trabajadores del mar afrontan "lo mejor que pueden" después de saber que tendrán que reducir los días que salen a faenar este año tras las últimas medidas impuestas por Europa.

Un cese de la actividad pesquera durante el mes de febrero que afecta a una decena de barcos de la lonja, y que los marineros aprovecharán para poner a punto las distintas embarcaciones, así como realizar distintos trámites necesarios.

Desde la lonja de Motril reseñan que, pese a este cese de la actividad, los barcos dedicados a las artes menores continúan faenando, por lo que por las instalaciones pesqueras seguirán pasando pulpos, salmonetes, lenguados, brecas, rapes y "la reina de la lonja": la quisquilla de Motril, que se encuentra en plena campaña, y de la que capturaron más de 34.000 kilos en 2021.

Actualmente, Motril cuenta con 12 barcos de arrastre, tres de cerco y 18 pequeños pesqueros de artes menores, que tienen una importante aportación estratégica a la economía y a la alimentación de la provincia que sirve de sustento a más de 120 familias de la Costa de Granada.

Está previsto que Andalucía reciba algo más de seis millones de euros para ayudar a cubrir las pérdidas por los días de parada biológica, unas subvenciones cofinanciadas por el Fondo Europeo Marítimo y de Pesca (FEMP) y el Estado.

Además, recientemente se dio a conocer que la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible repartirá unas ayudas a las Organizaciones de Productores Pesqueros de Andalucía (OPP) por valor de 2,1 millones de euros para la regeneración del medio ambiente marino, o para las que buscan mejorar la selectividad de las artes de pesca, entre otras.