Las primeras medidas fitosanitarias obligatorias para combatir la plaga del escarabajo de la ambrosía llegan a la Costa de Granada

Los agricultores de la Costa Tropical comienzan 2025 pendientes de la evolución de sus cultivos tras conocer en el último cuatrimestre del año la presencia de un pequeño insecto que había llegado hasta el litoral, convirtiendose en un verdadero quebradero de cabeza que ya se ha detectado en cuatro fincas de Motril, y que ha obligado a la Consejería de Agricultura a declarlo oficialmente como plaga por los peligros que presenta, especialmente para el aguacate, además de anunciar una serie de medidas fitosanitarias obligatorias. Y dicho y hecho, los dueños de dichas fincas han comenzado a ejecutar las primeras medidas para combatir esta plaga de cuarentena.

Hasta la fecha, según consta en la información consultada por Granada Hoy, se ha establecido como zona infestada por el escarabajo tres parcelas de aguacate, en la zona norte de la ciudad y otra ubicada en la zona sur en situación de abandono que cuentan con una resolución específica.

En una de estas fincas, que hace años se dedicaba al cultivo de la caña de azúcar, se detectaron indicios de la presencia del escarabajo de la ambrosía en varios ejemplares de ricino silvestre. Según explican a Granada Hoy fuentes consultadas, en las muestras analizadas se detectaron una alta presencia de este insecto con numerosos ejemplares adultos dentro de las galerías, principalmente hembras. En los últimos días del año se realizó una inspección en la finca en la que quedaron acopiados algunos de los restos vegetales que no pudieron destruirse en el momento, por lo que se le ha comunicado a los propietarios de la finca que los destruyan "dado el riesgo de extensión de la plaga".

Para ello, los propietarios deben quemar los restos vegetales informando previamente a los servicios municipales de medio ambiente del Ayuntamiento de Motril, y en caso necesario, podrán solicitar el asesoramiento del servicio de Parques y Jardines. Otras dos parcelas, según aseguran a este periódico, están siendo tratadas para iniciar la tala de los árboles infectados en esta misma semana.

Además, según apuntan estas fuentes en los próximos días empezarán a implementar las medidas fitosanitarias obligatorias en las fincas en las que se han confirmado positivos (3), según lo establecido en la declaración oficial de emergencia de la plaga de cuarentena y en las resoluciones individualizadas. En función del nivel de infestación que se observe se producirá tala parcial o arranque completo de árboles y la eliminación de los restos vegetales mediante quema, trituración fina y tratamiento insecticida.

Hace menos de un mes la Junta de Andalucía publicó en el BOJA las medidas impuestas por esta plaga de cuarentena para intentar frenar su avance. Así, desde que en octubre de 2023 se detectó el primer caso en la Costa, se han colocado más de 30 trampas repartidas por Motril y zonas aledañas, además se han quitado 18 árboles (16 arces y dos espinillos o espinos de Jerusalén) para evitar que estos escarabajos puedan trasladarse hasta otras especies. Todos los mecanismos dispuestos tenían como objetivo intentar confirmar que se trataba de hechos aislados y que se había quedado en árboles ornamentales ubicados en distintos puntos de Motril, sin embargo, todos los intentos fueron en vano y tras la primera confirmación en una finca ubicada en el término municipal, se localizaron más árboles afectados en una segunda plantación de aguacates de otro productor y en diversos ejemplares de ricino silvestre, lo que obligó a ampliar el foco de actuación hasta una decena de municipios.

Hasta el momento se habían determinado tres zonas de influencia desde los puntos de detección de los árboles urbanos afectados y la zona portuaria para colocar las trampas centinelas que han utilizado -20 en el caso del casco urbano-, otras cinco en zona forestal -Charca de Suárez, Cerro del Toro, Planta de Reciclaje, Paridor de Cañizares y La Garnatilla- y una última en el entorno de La Mojonera (Almería), que fue utilizada para enseñar a aquellos agentes que se estaban dedicando a la recogida de trampas, para saber como funcionaban.

Según ha podido saber Granada Hoy, desde Agricultura trabajan para ampliar esa red de trampeo desde Motril hasta La Herradura con penetraciones en el Guadalfeo, Los Guájares y en la zona del valle de río Verde.