Recogida de cañas en las playas o arreglos de caminos rurales: la Costa de Granada 'limpia' las secuelas de la Dana

El aumento del caudal de los ríos y ramblas por el temporal de lluvia y viento que ha azotado a la Costa Tropical, al igual que en el resto de la provincia, ha acabado con tramos de costa repletos de cañas, barro, restos vegetales, así como otros enseres que la fuerza del agua ha arrastrado hasta la costa, en otros puntos, la fuerza del agua ha dejado caminos anegados o impracticables. Si la jornada del martes estaba marcada por las fuertes lluvias y el viento, un día después la imagen que queda en el litoral granadino es el de las playas llenas de desechos y caminos rurales afectados.

El Ayuntamiento de Motril hace balance de los daños provocados por la Dana para iniciar los trabajos de arreglos. La alcaldesa de la ciudad, Luisa García Chamorro, ha indicado que "afortunadamente los daños han sido mínimos, aunque se ha cebado especialmente con nuestra playa, que está impracticable. Esta misma tarde comenzamos a limpiar".

Las playas de Almuñécar y La Herradura también permanecen repletas de la vegetación de cauces y ramblas que han sido arrastrados, desde el Ayuntamiento sexitano señalan a este periódico que "hasta que no acabe el temporal no se va a arreglar ninguna playa porque no ha pasado aún la tormenta", por lo que permanecerán a la espera de que el frente pase para evitar que se pueda destrozar lo arreglado, y una vez termine "se valorará y se actuará", aunque desde primera hora de la mañana el personal de la empresa de limpieza ha estado retirando restos de envases a mano para meter posteriormente las máquinas para retirar las cañaveras.

"El agua tan ansiada que esperamos, y que en nuestro caso ha aliviado bastante al campo de Almuñécar porque ha caído bien y ha calado en los acuíferos, en otros sitios como la Comunidad Valenciana o Castilla La Mancha ha sido una auténtica barbaridad que ha provocado que algunas ciudades entren en caos, con inundaciones de viviendas y locales comerciales, problemas de tráfico, personas desaparecidas y multitud de muertos", ha lamentado el alcalde de Almuñécar, Juan José Ruiz Joya.

Por su parte, el presidente de la Mancomunidad de Municipios de la Costa Tropical, Rafael Caballero, incide en que por suerte el agua caída en el litoral granadino no ha provocado incidencias reseñables. "En Otívar, los pluviómetros dan cifras de más de 56 litros en una hora, 18 litros en el caso de Almuñécar o 12 en Motril, aunque en el Azud de Vélez han sido 48 litros, lo que ha provocado que las obras del desglosado 9 de Rules hayan sufrido una serie de imprevistos, aunque nos consta que ya están trabajando en ellos y no van a suponer mucha demora en la consecución de las obras".

A los vecinos de Vélez de Benaudalla el agua les pilló por sorpresa y se registraron hasta 55 litros en una hora. El alcalde, Francisco Gutiérrez, visita varios caminos rurales que se han visto afectados. "Hace unos años se detectaron una serie de problemas con la evacuación del agua y durante estos años hemos ejecutado mejoras porque antes iba todo a un punto del pueblo, y gracias a estos trabajos previos no se ha lamentado ningún problema en el núcleo de Vélez, a excepción de una vivienda que ha sufrido un problema por el derrumbe de un muro, entrando el agua en la vivienda, y estamos ayudando a la vecina". En el momento del incidente no había nadie dentro de la casa, por lo que solo hay que lamentar daños materiales.

En este punto del litoral, los daños se han sufrido principalmente en caminos rurales que por las fuertes precipitaciones las pendientes "han hecho barranqueras grandes" pero se está actuando para restablecer la normalidad lo antes posible. Gutiérrez explica que tienen máquinas trabajando en puntos como La Gorgoracha para que "los agricultores puedan seguir con su trabajo".

El responsable municipal reivindica la petición que lleva "mucho tiempo" realizando con el barranco de Las Viñas, que fue afectado por el incendio de Los Guájares, que se vuelve peligroso con la llegada de las precipitaciones. "Hemos pedido ayuda a muchas administraciones y nadie nos da una solución. Cuando llueve aquí no se filtra el agua, no hay pinos ni árboles que frenen la caída, y toda el agua acaba aquí".

Una de las imágenes que más se compartió este martes por grupos de WhatsApp y redes sociales fue la del río de la Toba de Los Guájares por la cantidad de agua que llevaba, en este punto del litoral las afecciones se dieron principalmente en la zona afectada por el incendio de 2022. El alcalde de Los Guájares, Antonio Mancilla, lamenta que desde el incendio, cada vez que llueve se ven afectados por riadas, y las lluvias de este martes fueron "catastróficas". Explica que aunque los trabajos de emergencia que se están realizando en los caminos afectados han conseguido retener en cierta medida la erosión, pero hay otros caminos en los que no se ha podido actuar, "hemos pedido ayuda a la Diputación provincial, que en los próximos días nos visitará para hacer una valoración de daños, y anoche tuvimos que cortar la parte baja del núcleo de población de Guájar Faragüit por un barranco que ha levantado el hormigón de la calle y las farolas. De hecho, anoche teníamos el 50% del pueblo sin luz y estamos intentando recuperar la normalidad".

Mancilla señala que ya tienen localizados los sitios más afectados del municipio, algunos de los cuales podrán ejecutarse dentro de las obras de emergencia, pero otros tendrá que asumirlos el propio Consistorio como la zona del baño de Los Padules, que ha quedado anegado y se ha quedado sin mobiliario.