El Seprona investiga el fuego de Almuñécar con dos focos iniciales y que ha calcinado casi 600 hectáreas

Una vez extinguido el incendio forestal de Peña Escrita, en Almuñécar, que ha afectado a cerca de 600 hectáreas, los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil inicia las investigaciones sobre el terreno para intentar esclarecer las causas del mismo, así como su origen.

Según señalan fuentes de la Guardia Civil, una de las lineas de investigación se centran en las imagenes que tomó una vecina en los primeros momentos del incendio, en el que se aprecian dos focos distintos, y que podría servir a los agentes para determinar si detrás del origen pudo haber una imprudencia o una negligencia, sin que consten identificados en este primer momento de las diligencias.

Tras su estabilización trabajaron sobre el terreno una treintena de bomberos forestales, dos técnicos de operaciones, dos agentes de medio ambiente, un encargado de logística y el director del Centro Operativo Provincial. A ellos se sumaban cuatro vehículos autobombas, un helicóptero semipesado, una unidad médica y otra meteorológica.

El incendio ocasionó en sus inicios que una mujer de 57 años resultara afectada por inhalación de humo y tuviera incluso que ser trasladada de la zona del barranco Matachina al hospital Santa Ana de Motril para una mayor valoración.

Según las primeras estimaciones del Infoca, el incendio ha afectado a cerca de 600 hectáreas, en su mayoría forestales -unas 440 hectáreas- y 150 de uso agrícola o de otro tipo. Un extenso dispositivo de medios aéreos y terrestres han trabajado sin descanso en la zona para evitar que las llamas se propagasen, debido principalmente a la difícil orografía del paraje.

Durante la primera jornada, los trabajos se centraron en evitar que el fuego no alcanzase por su flanco oeste terrenos protegidos del Parque Natural de las Sierras de Almijara, Tejeda y Alhama, ya pasado el límite con Nerja, y así evitar que llegase a una zona forestal amplia en el límite de las provincias de Granada y Málaga, la cual conecta a su vez con el área protegida.

El alcalde de Almuñécar, Juan José Ruiz Joya, indicó hace algunas fechas que desde el Ayuntamiento trabajarán con el resto de administraciones para intentar buscar soluciones a los agricultores que han perdido sus producciones y explorar algunas vías de financiación como la Junta de Andalucía o el Gobierno de España. 

Ruiz Joya incidió en que la prioridad es asegurarse primero de que el incendio está apagado del todo para ponerse a trabajar y buscar soluciones para paliar los daños sufridos. 

Por su parte, el concejal de Agricultura de Almuñécar, Carlos Ferrón, señaló que trabajan con la intención de facilitar en el Ayuntamiento la información que puedan necesitar los afectados a partir del lunes, así como asesorarles en las valoraciones que hayan de hacer para poder optar a "todas las líneas posibles" de financiación.

Lo prioritario en muchas de estas pequeñas plantaciones será introducir nuevas líneas de riego, y una dotación a instalar puede valorarse en unos 15.000 euros por hectárea. A falta aún de comprobación sobre el terreno, las fincas que han resultado calcinadas no podrán cultivarse en las próximas temporadas, pero las que hayan estado afectadas por "golpe de calor" pueden recuperarse de cara al año que viene.

Ferrón señaló que, en primer lugar, "hay que valorar el porcentaje de pérdidas de la plantación" y "si es recuperable o no" teniendo en cuenta también cuestiones como si está afectada la masa foliar o también los vasos conductores de savia, con las recomendaciones técnicas pertinentes para podas o operaciones similares, además ha incidido en el coste que puede conllevar, pendiente asimismo de valoración, el daño al tendido eléctrico.