La falta de acierto condena a un buen Covirán Granada en Manresa

Los rojinegros salieron muy enchufados y estuvieron cerca de remontar todo el partido, pero finalmente la victoria se quedó en el Nou Congost (93-86)

Sergi García volvió a ser uno de los mejores de su equipo / ACB Photo

Buena actuación del Covirán Granada en el (todavía) inexpugnable Nou Congost, aunque la victoria se la llevó el Baxi Manresa por 93-86. Los de Pin no llegaron a descolgarse ni a irse del partido en ningún momento, pero solo estuvieron por delante en un gran primer cuarto con mucho acierto desde la línea de tres. Los rojinegros estuvieron bien en defensa durante la mayoría de minutos pero no tan acertados en la anotación, lo que les condenó a sumar su sexta derrota de la temporada.

El primer cuarto estuvo muy ajustado para ambos equipos en cuanto a anotación, y los rojinegros consiguieron que Manresa no consiguiera arrollar en los primeros minutos. A falta de dos minutos seguía reinando la igualdad en el marcador, con un Covirán acertado desde la línea de tres que tardaba muy poco en volver a empatar cuando el Baxi conseguía adelantarse.

Liderando a un equipo que salió enchufado desde el primer momento, Gian Clavell estaba siendo el mejor durante los primeros diez minutos, y ayudó a que el marcador se fuera favorable para los granadinos con un 25-27. El equipo de Pin anotó seis de nueve en triples en el primer cuarto, una de las mejores cifras de la temporada. Los dos rebotes ofensivos de Agus Ubal y la buena defensa, clave para irse al mini descanso por delante en el marcador.

Tras arrancar el segundo cuarto, los rojinegros siguieron muy enchufados desde la línea de tres, y la entrada de Amine Noua le dio mucho al Covirán en los primeros minutos del segundo cuarto, tanto que Diego Ocampo se vio obligado a pedir tiempo muerto cuando los granadinos consiguieron su mayor ventaja del partido con el 29-34.

Sin embargo, el francés cometió un error con una falta antideportiva tras un pique en un forcejeo que le dio dos tiros a los catalanes para ponerse a tres cuando faltaban seis minutos. Aún así, la defensa del equipo de Pin estaba saliendo muy bien, agotando las posesiones rivales. No le duró demasiado la alegría a los rojinegros, que vieron como le remontaban hasta ponerse seis por encima y Pablo Pin tuvo que parar el partido con 45-39 en el marcador. Mario Saint-Supery levantó al Nou Congost con dos entradas a canasta espectaculares asegurando que es una de las grandes apuestas de futuro del baloncesto español. 

Parcial de 20-5 en el segundo cuarto para el Baxi, que les pasó por encima a los rojinegros. Supieron plantar cara y tras un parcial de 0-5, fue esta vez Ocampo el que tuvo que parar el choque. Finalmente, el partido se fue al descanso con 51-46 para los locales. Debía cambiar la táctica el equipo de Pin si quería llevarse la victoria porque, a pesar de funcionarle bien la defensa de cambios durante las primeras instancias del choque, el Baxi detectó pronto como sobreponerse y acabó anotando con facilidad en varias ocasiones para irse al descanso con la ventaja y cierta sensación de superioridad con respecto a los granadinos.

Se reanudó el partido y no consiguió el Covirán acercarse en el marcador, si no lo contrario. El Baxi Manresa pasó por primera vez la barrera de los diez puntos de ventaja poniéndose con 57-46. Por si no¡ fuera poco, el colegiado le pitó una técnica a Pablo Pin. El tercer cuarto fue un bálsamo de tranquilidad para los locales, que siguieron dominando el marcador con Hunt, Alston Jr y Saint-Supery a los mandos. 

A pesar de todo, el Covirán no terminaba de descolgarse y se mantuvo con una distancia de en torno a los diez puntos durante todo el tercer cuarto, esperando su oportunidad bajando las revoluciones de un gran ritmo de Manresa. 

Se iba a decidir todo en el último cuarto, con una leve ventaja local de siete puntos. Esta se notaba y subió el nivel de contacto físico, así como la velocidad del juego. En dos chispazos se pusieron diez por delante, y el Nou Congost hizo su parte para aupar a los suyos, que se veían ya victoriosos. A falta de cinco minutos, la ventaja catalana era de doce puntos, y la balanza parecía comenzar a decantarse al lado del Baxi Manresa. Sin embargo, su ventaja se extinguió gracias a la fe del Covirán, que estaba a cinco cuando faltaban dos minutos y medio. Intentaron recortar aún más por la vía rápida mediante triples, pero todo lo que metieron al principio del partido lo fallaron a la hora de la verdad, perdiéndose así la mayoría de sus opciones. Siguieron presionando los de Pin, y con mucha fe se pusieron a tres cuando faltaban cuarenta segundos. Desgraciadamente, no pudieron culminar la remontada y la victoria se quedó en el Nou Congost.

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