El ostracismo de Iván Aurrecoechea en el Covirán Granada

Granada/Hubo fichajes que sorprendieron este pasado verano en el Covirán Granada. Uno de ellos fue el de Iván Aurrecoechea, un jugador que a sus 28 años aún no había debutado en la Liga Endesa. Internacional por España en 3x3, el nuevo pívot fue la segunda incorporación del conjunto entrenado por Pablo Pin.
Aurrecoechea formó parte de las canteras del Baloncesto Torrejón y del Movistar Estudiantes antes completar su formación académica en Estados Unidos. El madrileño jugó primero en el Junior College de Indian Hills para después pasar a vestir la camiseta de la Universidad Estatal de Nuevo México. Sus dos primeros años como profesional los pasó en Islandia en las filas del Thor AK y del Grindavik, posteriormente pasó por los Leones de Quilpué de la liga chilena y ya en España jugó en el Albacete Basket, Movistar Estudiantes, que lo reclamó para jugar la fase de ascenso a ACB y Gipuzkoa Basket, de donde llegó el pasado verano.
Las expectativas sobre el madrileño, a tenor de su currículum, no eran demasiado altas y su temporada así lo está corroborando. Pin lo ha utilizado como cuarto pívot y se ha quedado sin jugar hasta en once jornadas. Con Amine Noua, Wiley y Rubén Guerrero por delante, ‘Aurre’ ha estado disponible siempre tratando de aportar energía y dureza en el bloque, además de tratar de ayudar en el rebote. Pero en las últimas jornadas ni siquiera ha saltado a la pista.
La llegada de Giorgi Bezhanishvili tras la baja de Wiley lo ha relegado a un segundo plano. Hasta la jornada 19 alternó partidos con pocos minutos con citas sin jugar. El duelo que más tiempo estuvo en cancha fue ante el Real Madrid, con algo más de 14 minutos, haciendo un trabajo de desgaste ante los pívots madridistas. Pareció que su rol cambiaría a partir del duelo ante el Baskonia. Acumuló cinco jornadas jugando más de diez minutos, destacando especialmente frente al Hiopos Lleida, en el que logró su máxima anotación, 11 puntos y que se fue ovacionado por los aficionados granadinos cuando fue cambiado. Su carácter es de los que gustan en la grada.
Ante Valencia volvió a su papel de cuarto pívot y desde entonces no ha vuelto a disputar ni un segundo. En total, ha disputado 17 partidos, con una media de 7:42 minutos, 1,9 puntos anotados con un 50% de acierto en tiros de dos, 1,8 rebotes para dos de valoración. Y, eso sí, un paupérrimo 40,9% en tiros libres, una faceta que tiene que mejorar y mucho. No sería nada extraño que, en caso de descenso, algo que parece inevitable, Aurrecoechea pudiera seguir en Primera FEB, aunque para ello debería cambiar mucho en el Covirán Granada.
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