Una transformación del Covirán Granada para buscar el imposible

Granada/Como dicen que no hay dos sin tres, el Covirán Granada sueña con alcanzar también la permanencia en su tercera temporada seguida en la Liga Endesa.

No obstante, este curso se ha puesto la tarea más complicada que ningún otro, aunque viendo las dos salvaciones anteriores parezca imposible.

A la mala racha de resultados del equipo se ha unido una serie de lesiones que ha obligado al club a cambiar su plantilla con exageración, con hasta cinco caras nuevas en las últimas semanas.

El objetivo ha sido tener efectivos suficientes y de garantías con los que afrontar los partidos y también los entrenamientos intersemanales.

Si alguien se desconectó de la actualidad hace tres semanas ahora se sorprenderá al ver el plantel nazarí, ya que prácticamente la mitad es nuevo.

Han salido los pívots Édgar Vicedo y Jacob Wiley y han llegado cinco jugadores: el pívot senegalés Ousmane Ndiaye, el alero dominicano Omar Silverio, el pívot georgiano Giorgi Bezhamishvili, el alero estadounidense Samuel Griffin y el escolta italiano Riccardo Visconti.

La culpa de que haya venido tanto exterior la tienen las lesiones de Gian Clavell, Augusto Ubal, Scott Bamfoth y Pere Tomás.

Tras estar cerca de ganar, pero perder, ante Hiopos Lleida y Surne Bilbao Basket, el domingo ante Valencia Basket se verá si la revolución cumple con el efecto deseado.

Por otro lado, el dominicano Jean Montero lideró este martes por la noche al Valencia Basket ante el Hapoel Tel Aviv (91-82) en el primer partido de la semifinal de la Eurocopa y le situó a un paso de la final.

Todo después de un inicio de partido que puso al conjunto israelí diez arriba, momento en el que el visitante Marcus Bingham 'vaciló' al exterior 'taronja' con un tapón con el juego parado y activó, sin quererlo, una preciosa venganza.

La serie se traslada ahora a Bulgaria, donde el equipo israelí juega esta campaña sus partidos locales por la guerra con Hamas.

El viernes, dos días antes del Covirán-Valencia en el Palacio, se volverán a medir en un choque en el equipo de Pedro Martínez sellará si gana su pase a la final y que afrontará con la tranquilidad de que si pierde el cruce volverá a la Fonteta, que se ha asegurado no cerrar antes de hora su larga historia europea ante el cambio al Roig Arena.