El Linares no sentencia en Zamora

El CD Linares empató ayer a uno con el Zamora CF en el Ruta de la Plata, en un encuentro en el que demostró solidez y oficio ante un equipo al que le faltó recursos en ataque, y en el que logró un resultado que le permite afrontar la vuelta de la eliminatoria con muchas opciones de pasar.

La primera ocasión llegó del lado rojiblanco, con una falta indirecta que el capitán Aitor Sanz lanzó desviada desde el lateral del área del Linares. Tras la oportunidad, el Zamora siguió a lo suyo, con una buena presión. De este modo, aprovechándose de un Linares desdibujado y sin ideas desde la medular, el Zamora llevó el duelo a su terreno, con unas bandas abiertas e incisivas, así como una línea de cuatro zagueros muy adelantados.

El Linares trataba de trenzar alguna jugada, sobre todo gracias al delantero Óscar Martínez.No obstante, el conjunto Zamorano no se amilanó y continuó apostando por un fútbol abierto. Pero, a los 25 minutos de juego, en una de las primeras aproximaciones del bloque andaluz, Óscar Martínez sacó petróleo de un balón que le llegó en el centro del área, para obligar a Aarón a cometer penalti que Chico convirtió. Tras el tanto, el duelo se igualó llegándose al descanso con ventaja visitante.

En el segundo período, el Zamora comenzó como en la primera parte, con profundidad por ambos laterales. Así, Gurrutxaga se aprovechó de un error de Castillo en el área, tras un balón enviado desde la izquierda, para devolver la igualada al marcador. Pero el Linares no se volvió loco y, una vez Dani Bouzas se animó a coger la batuta del juego de su equipo, con criterio desde la media punta, el dominio andaluz se hizo mayor.

Así, Óscar Martínez falló una clara oportunidad de gol en el minuto 65, al echar fuera un pase de la muerte de Sierra. Cinco minutos más tarde, el mismo protagonista casi sorprende a Dani con un derechazo que rozó la escuadra.

Con la entrada de Diamé, el Linares adquirió mayor presencia en el medio del campo, pero el partido estaba visto para sentencia, a pesar de que el Zamora arriesgó en los últimos instantes con más corazón que cabeza.