Gran victoria de un notable Covirán Granada en la pista del Obradoiro (77-94)

El Covirán Granada logró su tercera victoria de la temporada, que es la primera a domicilio y la primera vez que enlaza dos seguidas en esta temporada, al ganar por 77-94 al Monbus Obradoiro en una de sus mejores actuaciones del curso.

El equipo dirigido por Pablo Pin firmó una notable actuación, parando bien en defensa a un equipo anotador en casa como el gallego y mostrándose muy acertado en ataque, con un trabajo coral, con cinco jugadores por encima de diez puntos, en el que destacaron a título individual Cheatham y Costa.

El Covirán Granada siempre fue por delante y siempre fue mejor, administrando bien la renta obtenida al inicio de partido. Cuando lo igualaron los locales, hubo otra escapada ya decisiva en el tercer cuarto hasta vivir en un cómodo final.

Volvió a jugar Kairys, no viajó Ziv, no tuvo minutos Konontsuk y participó en el choque de forma testimonial Germán

El partido, a diferencia de lo habitual como visitante, tuvo un buen inicio para el Covirán Granada, con cinco puntos de Costa, parcial de 2-10 y una defensa férrea. Ya era hora de salir bien fuera de casa.

El tiro de Tomás para el 4-15 no entró y dos triples seguidos metieron del todo en el partido a los locales (10-12, 5’), aunque contestó bien Cheatham con otra súper canasta.

El partido, justo antes de que empezaran las rotaciones, se convirtió en un festival de triples (15-18, 7’). Kairys dijo adiós a sus problemas de tobillo y entró en pista por un despistado Felicio.

Dos puntos del lituano (15-22) confirmaron que el Covirán Granada anotaba con facilidad en el primer cuarto, que acabó 15-24 tras otra buena canasta de Cheatham (10 puntos en el primer cuarto). Difícil empezar mejor.

Hasta se unió a la fiesta, ya en el segundo cuarto, Iriarte con un triple para poner diez puntos de diferencia en el marcador (17-27). Poco después cometió el capitán su tercera falta personal.

Mombus Obradoiro anotó en el segundo acto con más facilidad y Pin tuvo que parar el partido porque se colocó sólo cuatro abajo (27-31, 15’). Costa marró el tiro en tres ataques seguidos y llegó el atasco ofensivo, por lo que tuvo que volver a pista Thomasson.

Llegaron a empatar el choque los locales (36-36 con tres minutos para el descanso), tomando oxígeno el Covirán Granada con cuatro puntos seguidos de Felicio para que ahora fuera Moncho Fernández quien parara el choque con un tiempo muerto.

Con 40-43 y las espadas en todo lo alto se llegó al descanso. No pudo mantener el Covirán Granada la renta del primer cuarto, aunque al menos aguantó el arreón local y se mantuvo por delante.

La sentencia

La segunda mitad volvió a tener un buen inicio del Covirán Granada (42-50), recuperando la fluidez en ataque. Otro triple de un sensacional Cheatham devolvió la renta a los diez puntos y volvió a obligar a Moncho Fernández a llamar a los suyos a la banda (47-57, 24’).

Bajó algo el ritmo anotador de los visitantes (51-57), aunque una antideportiva local devolvió la ventaja con cuatro puntos seguidos. Pustovyi y Suárez eran el peligro local (55-61), pero Costa mantuvo la distancia (57-66, 28’).

Seis puntos de Kramer pusieron la máxima renta en el partido (61-72), aunque el cuarto finalizó con un triple local para entrar en el acto final 64-72.

Volvió a encoger la goma el Obradoiro para colocarse a cuatro puntos al inicio del último cuarto (68-72), con Thomasson en el banco cogiendo aire.

Cheatham, con su enésimo canastón, devolvió las ocho unidades de renta (68-76) y Kramer metió otro triplazo para poner la máxima en once (68-79 con seis minutos por delante). Lo importante es que el Covirán defendía como en sus mejores momentos.

En pleno festival direccional de Costa lo estiró a trece Felicio (68-81 tras 0-9 de parcial) y Moncho lo volvió a parar porque empezaba a verlo perdido ante la incapacidad de los suyos para parar a los granadinos. Ya sólo lo podía perder el Covirán.

Más aún tras ponerse quince arriba (70-85) con otra canasta de Costa con robo de Cheatham. Lo mejor es que sólo quedaban tres minutos.

Obradoiro prácticamente bajó los brazos, incapaz ante el buen trabajo ofensivo y defensivo del Covirán, que al final aumentó su renta hasta acabar ganando tras llegar a colocarse 18 arriba poco antes.