De la Costa Tropical al Campeonato de Europa Júnior de Surf: El doble campeón de España, Alfonso Zamora, buscará el título de Longboard

Casi sin tiempo para saborear el título de campeón de España conseguido hace apenas semanas en Canarias, Alfonso Zamora González (Motril, 2007) se prepara para intentar brillar junto a la Selección española en el Campeonato de Europa Júnior de Surf que se disputa este fin de semana en Torres Vedras (Portugal). Los amantes de este deporte náutico en la Costa Tropical aprovechan hasta el último minuto cada vez que llega un temporal de olas para disfrutar de unas de sus pasiones, ya que pueden estar semanas sin grandes movimientos que propicien su práctica, cada vez más arraigada en el litoral granadino, sin embargo, la desembocadura del río Guadalfeo, se ha convertido en el 'campo de batalla' de este motrileño que se ha convertido en doble campeón de España en la especialidad de Longboard.

Entre campeonato y campeonato, aprovecha junto a amigos, e incluso su padre y madre, para desconectar a la vez que entrena manteniendo el equilibrio y, casi danzando, con pasos seguros sobre la tabla. Las vistas están puestas en una de las citas más esperadas dentro del calendario en el que jóvenes de toda Europa lucharán por el ansiado título y convertirse en los nuevos campeones europeos, tras dos años de ausencia de este evento.

Sobre su participación en el Campeonato de España celebrado en Canarias y que le ha valido para revalidar el título que consiguió en 2022 de campeón de España en categoría sub 18 de surf, Zamora explica que la experiencia ha sido complicada, "el nivel de los competidores es cada vez más alto", de hecho los surfistas Martín García, Oier Azpeitia o Matías Plumed no se lo pusieron nada fácil. "Además, nos peleamos por representar a España en el Europeo, fue un campeonato muy tenso pero a la vez muy divertido, y las olas estuvieron muy bien".

Zamora se proclamó campeón en los últimos minutos de la competición. En este sentido, asegura que fue "bastante difícil", "al principio hice una buena ola, me coloqué el primero la mayoría de la manga, pero uno de los competidores hizo una ola muy buena y se puso en primera posición. Estuve los últimos minutos buscando la ola que me diese mejor puntuación, cogí una que pensé que era bastante buena, a falta de un minuto y medio más o menos estaba cerca de la orilla y pensé que ya no tenía tiempo, pero cambié la actitud, tiré para arriba, cogí la ola y fue la que me dio mejor puntuación". "Después de eso tuvimos que esperar unos cinco minutos en la orilla para saber si me habían dado la manga, fueron unos minutos eternos".

La desembocadura del río Guadalfeo se ha convertido en su lugar de entrenamiento, y lejos de lamentarse porque las olas que hay en esta zona del litoral son diferentes a otros enclaves donde la práctica de este deporte está más arraigado, precisamente por la predisposición del mar, asegura que le supone una ventaja. "Cuando llego a un sitio así, -en referencia a otras zonas donde hay un mayor oleaje- si pillo mala previsión puedo jugar con ventaja porque el resto no está acostumbrado, pero si hay buena previsión también es positivo porque me vengo arriba y lo disfruto más".

"Me preguntan que cómo puedo ser campeón de España y venir del Mediterráneo, cuando digo que vengo de Granada siempre se sorprenden y me dicen que cómo es posible si aquí no hay olas", cuenta con una sonrisa, "aunque yo siempre explico que aunque cuesta, siempre hay olas como para practicar. Siempre hay que buscar el lado positivo".

Alfonso se enamoró del surf gracias a su tío 'Migue', que un día convenció a toda la familia para pasar un día en la playa haciendo surf cuando él apenas tendría 7 u 8 años. "Alquilamos unas tablas y nos metimos todos en el agua, un poco por hacer la gracia. Ese primer día no hice nada, no llegué ni a ponerme de pie, pero me gustó, la familia decidió seguir viniendo y nos enganchamos. A partir de ese momento, mis padres, mi tío y yo mismo lo seguimos practicando".

En busca del título europeo

El motrileño se encuentra estos días en la playa de Santa Cruz (Portugal), el lugar escogido para celebrar el campeonato europeo de selecciones por sus fuertes corrientes. En la última edición, la selección española realizó un gran papel conquistando el oro por equipos.

"Llego con muchas ganas, sobre todo porque estuve en 2022, y repito este año. En aquella ocasión nos llevamos el título de campeones de Europa y el objetivo ahora es extenderlo y revalidarlo, pero sobre todo intentar mantener o mejorar mi título de tercero de Europa", explica el tablonista, quien señala entre risas que, aunque "sería muy fuerte" volverse con el título de campeón de Europa, "es muy difícil porque cada año aumenta el nivel, tengo muchos competidores con los que ya coincidí la última vez. Tengo ganas de batirme con ellos para ver cuanto he mejorado en este tiempo, pero también para ver en qué han mejorado ellos y ponerlo en escala".

El longboard es la modalidad clásica por excelencia en el mundo del surf. En España cada día cuenta con más seguidores gracias a la elegancia de los movimientos que se realizan sobre la tabla, además de contar con los festivales más longevos y emblemáticos a nivel nacional. La categoría más popularizada es la de la tabla corta, alrededor de 6 pies, y el objetivo es realizar muchos giros aéreos y maniobras radicales; en cambio, el longboard es más clásico, su maniobra principal consiste en andar por la tabla y poner los pies por delante de la punta, esto se combina con giros y maniobras clásicas.

"El surf es un deporte que para aquellos que lo prueban y les gusta, se convierte en un estilo de vida. Siempre dedicamos nuestro tiempo a surfear y mejorar, es muy divertido y de espíritu bonito porque te permite conectar con la naturaleza", concluye.