La FIFA abre expediente al granadino Miguel Rodrigo por denunciar "trampas" en el Irán-Francia

Fútbol Sala

El actual seleccionador de fútbol sala de Tailandia acusó a los dos conjuntos de falta de deportividad

Miguel Rodrigo es el actual seleccionador de fútbol sala de Tailandia.
Miguel Rodrigo es el actual seleccionador de fútbol sala de Tailandia. / G. H.

Madrid/El entrenador granadino Miguel Rodrigo, seleccionador de fútbol sala de Tailandia, ha sido expedientado por la FIFA después de haber denunciado el polémico partido Irán-Francia, correspondiente a la fase de grupos del Mundial de Uzbekistán, y en el que acusó a los dos conjuntos de falta de deportividad y de hacer "trampas", según confirmó el técnico en sus redes sociales.

Rodrigo, que clasificó a su selección hasta octavos de final, en donde perdió ante Francia por 5-2, destacó en un comunicado que ha sido denunciado "por haber denunciado la trampa del partido Francia-Irán" y que "imagina" que ha "sido denunciado por ambos". "Todo perfecto, todo al revés”, dijo el preparador afincado en Granada.

Rodrigo quiso, además, aclarar una vez más su posición: “Hubiese aceptado con normalidad absoluta unos octavos de final contra el ganador del Francia-Irán si hubiesen jugado su partido con deportividad y competitividad. Indiscutiblemente, al perder contra alguno de ellos ese partido, en este caso, la selección nacional de Francia, les hubiese felicitado y deseado suerte en su próximo partido de cuartos de final”, al tiempo que continuó con la crítica al conjunto galo.

“Lo que no acepto, pero me resigné a jugar, es un partido contra Francia lleno de un cuerpo técnico faltos de escrúpulos y valores deportivos. Jugué y perdí, pero las risas y burlas tras el 3-1 por cuenta principalmente del jugador número 10 - Abdessamad Mohammed- y otros, la falta de respeto de su entrenador, que a falta de segundos para el final solicitó un tiempo muerto para humillarnos...”, lamentó.

Rodrigo, igualmente, se refirió al capitán francés, Kevin Ramírez, de origen español: “Vino a darme la mano y me dijo que yo tenía la culpa de todo, que estaban recibiendo amenazas por mi culpa. Ante esta falta de consciencia de lo que hicieron, al no pedir al menos perdón en ese momento, yo le negué la mano y le dije de nuevo que no tenían educación ni valores”, reveló.

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