Un partido sin tarjetas

Los números del partido reflejan que el Granada CF se mostró más ofensivo que el Real Jaén. Los rojiblancos tardaron un poco en pisar el área. Intentaron no perder el sitio con la intención de que su rival no le cogiera desprotegido atrás. Eso lo consiguió y con el paso de los minutos hizo más daño. No le importó renunciar al balón. La estrategia dio resultado y se aseguraron los tres puntos, que al fin y al cabo es lo que más importa en esta recta final.

En el aspecto que hubo más igualdad fue en los lanzamientos entre los tres palos. El Real Jaén lanzó menos a lo largo del encuentro, pero sí que tuvo puntería y obligó a José Juan a tener que trabajar para impedir que esos disparos acabaran dentro de la portería. En la primera mitad cada equipo lanzó cuatro veces entre los tres palos. Más llegadas al área tuvo el Granada CF tanto en la primera parte como en la segunda. El equipo de Fabri disparó muchas veces, aunque la mitad de los lanzamientos se desperdiciaron.

Lo sorprendente es que no hubo tarjetas en todo el encuentro. Al Real Jaén no le interesaba entrar en el fango para evitar así cualquier contratiempo de cara a las eliminatorias de ascenso. Un dato significativo es que el conjunto entrenado por Álvaro Cervera sólo cometió siete faltas durante todo el partido. No así el Granada CF, que lo dobó en ese aspecto. El propósito principal era no entrar más fuerte de la cuenta, porque una expulsión sí que hubiera costada muy cara. Todos los jugadores van a entrar limpios a la fase de ascenso por la normativa que impera por parte de la Federación Española de Fútbol. Fue un encuentro limpio y el árbitro entendió ese mensaje. No hubo ninguna entrada dura y se dejó las tarjetas en el bolsillo.

Hasta seis saques de esquina lanzaron los locales, aunque en ninguno hizo daño. Sólo asustó con un remate de Iván Amaya en la primera parte. Llevan tiempo los rojiblancos sin crear peligro a balón parado, aunque esta vez tampoco le asustaron y supo defenderse bien en esas acciones.

Fue un partido táctico, si bien hubo oportunidades para sorprender al contrario. Eso propició que los porteros no se aburrieran. José Juan acabó con cinco paradas, algunas de mérito, mientras que Gerardo, guardameta del Real Jaén, tuvo que estirarse hasta seis veces. Por lo que se refiere a fueras de juego apenas se registraron. Uno para el Granada CF y dos para su oponente.