El Raca Granada retira a su primer equipo de la Liga Femenina 2 y denuncia "desigualdad"

Granada/El Raca Granada no seguirá compitiendo en la Liga Femenina 2. El conjunto presidido por Luis Felipe ha decidido retirar al equipo en mitad de la temporada por “falta de liquidez, no aumentar la deuda del club y preservar el crecimiento de los equipos en categorías inferiores”.

Hay dos formas de defender una gestión: analizarla internamente o echar balones fuera y culpar a terceros. Esta segunda vía es que ha optado el cuadro capitalino, que en un extensísimo comunicado oficial que acusa al Ayuntamiento de Granada de “desigualdad” en la subvención municipal, que en la temporada 2017-2018 “comenzó siendo proporcional a otras, pero luego llegó la desigualdad, e incluso nos vimos afectadas por un recorte con el Covid como excusa”.

El alcalde y el Palacio

El club indica que “en las últimas horas el alcalde de la ciudad, Francisco Cuenca, nos ha garantizado una subida de 5.000 euros en la subvención que recibimos”, una cantidad que considera “insuficiente para mantener un proyecto en la categoría, como así se lo hemos hecho saber”. Y es que considera que “las subvenciones públicas deben ser para reducir las desigualdades, no para aumentarlas”.

La pasada campaña, el Raca jugó en el Palacio de Deportes, que “nos salió a deber. Los gastos totales derivados del uso del Palacio (limpieza, ambulancia y seguridad) superaban la subvención municipal la de la temporada 2021-2022”, que afirman que “aún no la hemos recibido”. Un año en el Palacio en el que “tampoco nos sentimos cómodas. Parecía que estábamos invadiendo la casa de otro y no usando la de los granadinos”. Y lo argumentan señalando “un reparto desigual en el que se nos cerraba la vía de ingresar patrocinios porque la publicidad se quedaba fija en el Palacio”. El cuadro granadino hace alusión a “llamadas de presión” y “amenazas de que si ascendían a ACB (se refiere al Fundación CB Granada), nos echarían y así fue”.

Llamadas

En su duro comunicado, desvelan que “desde que llegamos a Competiciones FEB hace cinco años, hemos visto como se nos han puesto trabas y zancadillas, situación que se acrecentó el año pasado a nuestra llegada al Palacio, pues parecía que estorbábamos, como así ha terminado siendo”. Incluso hace alusión a que “aprovechando que no podemos competir en precios, se han ido tocando, uno tras otro, a cada patrocinador principal nuevo que conseguíamos. Se han llegado a hacer llamadas para pedir que “a Raca no le den nada” y romper así negociaciones en busca de financiación”.

Por último, y muy brevemente, asumen “nuestra responsabilidad. Igual debimos ser más cautelosas, comunicarnos mejor, hacer público antes nuestro sentir, ser menos ambiciosas, confiar menos en las palabras y esperar más a los hechos”. Respecto al patrocinador principal de la pasada campaña, cuyas promesas no se ha hecho efectivas, no se hace referencia.