El Recreativo Granada peca de inexperiencia y cae en Torremolinos

No mereció el Recreativo Granada tanto castigo en su visita al campo del Juventud de Torremolinos CF. Y es que, los de Jon Erice protagonizaron una gran primera mitad, en la que dominaron y pudieron haberse adelantado en el marcador. Cierto es que también los locales, a la contra, tuvieron sus ocasiones, pero al final, al descanso, se llegaba con el cero a cero todavía en el luminoso. En la segunda mitad, sin embargo, las ocasiones fueron muchas menos, prácticamente ninguna clara para ninguno de los dos equipos, salvo los dos tantos locales, que llegaron en dos fallos defensivos de un cantera nazarí al que le volvió a pasar factura la juventud de sus hombres.

Salió muy enchufado el filial granadino al Municipal El Pozuelo, con ganas de demostrar cosas y de tutear al rival. No solo hizo eso, si no que desde el principio, fueron los de Jon Erice quienes marcaron el ritmo del encuentro, moviendo bien el balón y buscando siempre la puerta contraria. También el equipo de la Costa del Sol llegaba hasta las inmediaciones del área defendida por Isachenko, aprovechando sobre todo los contragolpes para generar peligro ante el área de su rival. Tanto es así, que ya en el minuto 10 se vio obligado a lucirse el meta de los granadinos en una internada local que culminó con un remate de Camacho que conseguía despejar Isachenko. La replica de los canteranos granadinos la ponía, apenas tres minutos más tarde, Adrián Heredia, que culminaba una gran jugada colectiva de los visitantes. Pero su remate acababa estrellándose en el poste.

El encuentro se volvía, por minutos, de ida y vuelta, con un Recreativo Granada que no cesaba en su empezó por encarar el aro contrario y un Juventud de Torremolinos CF muy sólido en defensa que, cada vez que recuperaba un balón, salía rápido al contragolpe y acababa generando peligro. No había un momento de relax en las gradas del Municipal El Pozuelo, y en el minuto 22 tuvo otra buena ocasión el equipo visitante, esta vez en un saque de esquina que remataba en el área Samu Cortés, pero que acababa despejando un defensor local in extremis. Sacó el balón el equipo local, pero apenas un minuto más tarde volvió a tener el Recreativo Granada el gol en sus botas, esta vez en las de Mario González, que obligó a Javi Cuenca a ´volar´ para evitar que el balón se colase en su portería.

Con el paso de los minutos, las llegadas del Recreativo Granada se volvían algo más precipitadas y las ocasiones claras eran menos, incluso pudo llegar el 1-0 en el minuto 38, en una internada de Camacho que salvaba Bohdan Isachenko en el mano a mano.

Ya en la segunda mitad, el ritmo del encuentro bajó enteros, aunque aún era el recreativo Granada el que mantenía cierto dominio del balón y trataba, con menos ímpetu, de llegar a la portería contraria. Una vez más, sin embargo, las imprecisiones en el último pase impedían que los de Jon Erice consiguiesen, tan siquiera, poner a prueba a Javi Cuenca. Por el contrario, era el Juventud de Torremolinos CF el que, al contraataque, aprovechaba los desajustes defensivos del equipo visitante para generar peligro, como en el minuto 58, cuando Boukir conseguía, in extremis, cruzarse ante P. Servetti, para evitar el remate de este en boca de gol. No quedó ahí la cosa y otro despiste defensivo les acabó costando a los granadinos el primer gol en contra en el minuto 64, con un Fran Castillo muy acertado.

El 1-0 desestabilizó a los canteranos del Granada, que apenas seis minutos más tarde encajaban el segundo en otra jugada en la que la zaga nazarí no estuvo a la altura.

La situación se le había complicado mucho a los jóvenes jugadores del Recreativo Granada, que pese a todo intentaron enmendar la situación. Recuperaron los visitantes el control del balón, pero lo cierto es que apenas inquietaron ante un Juventud de Torremolinos completamente cerrado ya en su área. Los de Erice movían bien la pelota en el centro del campo, pero les costaba pasar de la línea de tres cuartos, donde las imprecisiones y la solidez defensiva de los locales acababan por abortar todas sus jugadas de ataque.