El Recreativo Granada, a ganar y esperar un milagro
Los nazaríes podrían descender en la Ciudad Deportiva este sábado contra el Orihuela (16:00 horas) incluso ganando, porque todo depende del resultado del San Fernando

Granada/Tras una temporada nefasta, llega la hora de rendir cuentas ante su afición para el Recreativo Granada. Los nazaríes reciben al Orihuela CF este sábado en la Ciudad Deportiva a las 16:00 horas, y podría ser el último partido en el que sigan con vida esquivando un descenso inevitable.
Con tan solo 23 puntos en su casillero y a once de la plaza de 'playout' por la salvación —la única vía de escape que aún le queda—, el Recreativo Granada se asoma al abismo con apenas doce puntos por disputarse. El margen de error es prácticamente nulo y el milagro, a estas alturas, se presenta como algo casi idílico. Las plazas de permanencia directa ya han dejado de ser una opción matemática para el filial nazarí. El escenario es claro: todo lo que no sea una victoria ante su próximo rival, combinada con un tropiezo del San Fernando frente al UCAM Murcia, enviará de forma definitiva al Recreativo a la quinta categoría del fútbol español. Ni siquiera un empate serviría para prolongar la agonía. El filial necesita sumar de tres y que los astros se alineen en tierras gaditanas, o el descenso será una realidad inevitable.
Independientemente, la dinámica del Recreativo no incita a darle lugar a posibles milagros. Los nazaríes suman cinco derrotas consecutivas, las últimas cuatro sin haber logrado quitar el cero de su marcador. El último triunfo fue el 23 de febrero ante la Deportiva Minera por 2-3, y si ya por entonces era complicada la permanencia ahora ya todavía más. El último encuentro del filial nazarí fue el ejemplo de la desidia que vive la plantilla: derbi ante otro equipo en descenso y contra el que ganar sería vital, y a los doce minutos el Cádiz ya iba ganando 2-0. Así quedó hasta el final para hundir más si cabe al cuadro de Raúl Barroso.
Se genera una situación difícil de manejar para el técnico, que dijo la semana pasada que por como fueron los entrenamientos la derrota ante el filial cadista era cuanto menos esperable. Sus jugadores habían estado "desconcentrados" y la semana no fue buena, algo que se plasmó en el campo rápidamente. Muchos estarán más pendientes de buscar su mejor versión para poder salir a otro equipo (y no frenar su progresión con un descenso a Tercera Federación) que de salvar la papeleta o mostrar un mínimo de competitividad en los partidos que quedan de temporada. Una situación tan criticable como entendible desde el punto de vista de un joven jugador que lo que más quiere es triunfar sea allí o allá.
El rival
El Orihuela llega a este partido en una situación mucho más cómoda. Son décimos y tienen la permanencia prácticamente asegurada en la categoría. Acumulan 42 puntos, gestados mediante once triunfos, nueve empates y diez derrotas. Su mayor carencia puede estar en la anotación de goles, puesto que para vivir en la décima posición suman únicamente 27 goles a favor, con el propio Recreativo teniendo uno más. El problema está en que los nazaríes son el equipo que más recibe, con 47 goles en contra, promediando uno y medio por partido.
Además, el club alicantino acaba de anunciar la renovación de su entrenador José Francisco Grao "Pato", que cogió al equipo hace siete jornadas y le está dando buenos frutos. Sin embargo, vienen de perder por la mínima en casa ante el Linares Deportivo, un resultado que cortó una estupenda racha que les llevó a terminar el mes de marzo invictos. Vencieron a Cádiz Mirandilla, Xerez, Balona y Villanovense, y empataron contra el Águilas.
Tras un abril donde sellaron virtualmente la permanencia, llegan sin mucha exigencia a la Ciudad Deportiva, algo que podría venirle bien al cuadro nazarí para al menos conseguir una victoria que les devuelva las ganas y la motivación. En el partido de la primera vuelta fueron vapuleados, porque el Orihuela venció 3-0 con goles de Chuli por partida doble y Pitu.
El propio Pitu es el máximo artillero de los alicantinos, con nueve goles y una asistencia en 27 partidos. El que se lleva el premio de ser el máximo asistente es Kamal, con tres. Una de ellas fue precisamente ante los nazaríes. También relucen los cinco tantos de Chuli o los cuatro del argentino Isnaldo. En estos nombres está prácticamente todo el caudal ofensivo del Orihuela, por lo que está claro sobre quién habrá que poner más vigilancias.
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