Fernando Faces
Perspectivas económicas: España 2025
Enrique Riquelme | Presidente y cofundador de Grupo Cox Energy
Sevilla/Cox Energy irrumpió por sorpresa la semana pasada en la puja por los activos en liquidación de Abengoa SA. En esta entrevista, su presidente y cofundador, Enrique Riquelme (Cox, Alicante, 1989) explica sus motivaciones y planes para reflotar la multinacional, que mantendría unida, radicada en Sevilla y con todo su empleo actual.
–¿Qué es lo que ha llevado a Cox Energy a plantearse participar en el concurso conexo por los activos de Abengoa?
–Nuestra compañía, que se fundó en 2014, ha ido integrándose verticalmente en todas las partes que podíamos integrarnos para poder estar en toda la cadena de valor del negocio. Entonces vemos la oportunidad del perímetro del grupo Abengoa. En las sinergias que existen entre los dos grupos hay una oportunidad, que a la vez es un reto. Y cuando hemos profundizado más en conocer la compañía, el equipo humano que tienen, cada división de cada área geográfica, te das cuenta de que cada vez más es una oportunidad. Por eso la respuesta a su pregunta son las sinergias, principalmente en el campo de la energía, donde Cox está integrado en todo excepto en el EPC –la construcción de las plantas– y donde Abengoa es uno de los líderes mundiales en ese sector. También en líneas de transmisión, negocio en el que Cox arrancó su división hace un año, pero donde tampoco íbamos a construir, que es algo que también haría Abengoa. En el negocio de operación y mantenimiento de las plantas, donde Abengoa tiene un fuerte liderazgo, Cox tampoco ha entrado. En esas tres de las cinco divisiones que tiene hoy Abengoa habría sinergias entre las dos partes. Y por nuestro lado daríamos una carga de trabajo, como hemos especificado en la oferta de manera vinculante, que probablemente es una especial característica de nuestra propuesta. Son proyectos con nombre y apellidos que dependen de nosotros mismos.
–¿Puede haber sinergias en agua e innovación?
–La parte de innovación es hidrógeno, sobre todo, y dentro de hidrógeno nosotros tenemos una división de hidrógeno verde para producirlo tanto en Europa como en América Latina. En agua, tanto la tecnología de desalación y potabilización en la que Abengoa es líder se utiliza en áreas geográficas específicas donde esas concesiones llevan asociadas un alto consumo energético. Ahí también hay sinergias con la producción de energía solar, que es la más económica.
–Cuando dieron a conocer la oferta, cifraron en 3.200 millones en tres años la cartera de proyectos que dice que dependen directamente de Cox. ¿Son básicamente fotovoltaicos?
–Sí, lo es el 100% de la cartera de proyectos que aportamos de manera vinculante. Y podemos hacerlo porque como grupo industrial estamos en posición de otorgarle esta carga de trabajo, y creo que es la clave para lograr una viabilidad financiera, técnica, de empleo... Esos 3.200 millones de euros son contratos de EPC de la construcción, donde además asumimos los avales de esos proyectos que tienen que ejecutar, y por tanto no va a consumir la línea del crédito de avales de la propia Abengoa. Nuestro plan de negocio no es sustitutivo. Nuestro plan estratégico, nuestra aportación de negocio, se suma al que ya tiene la propia Abengoa. Y para éste. hace falta caja y avales. Serán parte de las mejoras. Ese plan de EPC de 3.200. millones de adjudicación directa estos próximos tres años van asociados a un margen bruto abierto. Es un sistema que se usa bastante en Estados Unidos ya en licitaciones y que da una viabilidad financiera a la compañía. También para los proveedores, para el capital humano, para la banca... ya que de esos 3200 millones le damos un margen bruto del 8%. Esa carga de trabajo lleva además asociado negocio de operación y mantenimiento, una vez que estén funcionando progresivamente estos parques fotovoltaicos que primero construiría Abengoa, un negocio de 66 millones de 67 millones de euros anuales a largo plazo, con un margen bruto del 20%, unos 13-14 millones de euros anuales. Y luego, además, en la fábrica de Utrera nos comprometemos a hacer una inversión para adaptarla a la fabricación de las estructuras metálicas para parques solares fotovoltaicos. Únicamente con nuestros contratos aportamos unos 320 millones de euros, con un margen del 10%. En Utrera ya no sólo habría despidos, sino que habría una inversión para adaptarla y fichar nuevo talento que se necesita para poder fabricar todo esto.
–La oferta no prevé en principio un precio, ¿puede eso provocar el rechazo de los acreedores?
–La oferta va a tener un precio. Se verá en la fase de mejoras. No podemos mostrar todas las cartas el primer día en un proceso competitivo como es éste. La parte financiera hemos preferido tenerla de manera vinculante asegurada para nuestras mejoras. Por lo tanto, en la oferta primera aportamos la carga de trabajo que depende de nosotros y es vinculante por nuestra parte, porque únicamente depende de nosotros esta inversión.
–¿Puede tener entonces el respaldo de los principales acreedores del concurso conexo?
–Por supuesto que puede tenerlo. Estamos trabajando para poder tener ese respaldo. Contamos con todas las partes involucradas. Estamos hablando con los sindicatos y escuchando todas las propuestas para poder adaptarlas a mejoras. Estamos hablando con la banca, avalistas, con los acreedores, estamos dando la cara con los diferentes grupos estratégicos y que tienen voz en este proceso para tratar de llegar a un consenso. Para que la compañía no tenga que verse obligada a estar de vuelta abriendo un periodo de negociación, sino que trae ya la solución completa desde el día uno.
–¿Cuál sería la fórmula jurídica? ¿Cómo se integraría lo que es el perímetro de Abengoa en Cox Energy?
–Somos un grupo con muy poquita deuda, sólo a nivel de proyecto, muy saneado económicamente y una estabilidad financiera muy importante. Hemos decidido, después de conocer al detalle la compañía, integrarla dentro del grupo.
–¿Sería a través de Cox Energy Europa?
–Sí, y sería ya una parte importantísima, un perímetro importante del grupo Cox, que se mantendría con todas las obligaciones por nuestro lado, con toda la inversión en corto, con toda la capacidad financiera del grupo y donde el grupo avalaría como holding para muchos de los desarrollos, procesos, avales. Confiamos en la compañía. Y eso es lo que vamos a hacer, porque somos un grupo industrial, somos un grupo que no venimos ni mucho menos a especular ni a dividir la compañía.
–¿Plantea mantener la marca Abengoa?
–Por supuesto. El nombre Abengoa creo que es un activo que es parte incluso de la marca España. Y en el exterior es una marca muy bien valorada, aunque se sepa que ha tenido problemas financieros.
–¿Ustedes creen que tienen la mejor oferta industrial que se presenta por Abengoa?
–Creo que tenemos, no sólo la mejor, sino que la única oferta industrial por Abengoa. Somos u grupo industrial que conoce el sector, hay sinergias bidireccionales entre los dos lados y tenemos carga de trabajo para darle viabilidad.
También te puede interesar
Lo último
Tribuna Económica
José Ignacio Castillo Manzano
La financiación autonómica, ¿Guadiana o Rubicón?
La tribuna
Voto de pobreza
El lanzador de cuchillos
Martín Domingo
Superioridad femenina
Editorial
Hay que darse mucha más prisa
Contenido ofrecido por Banco Santander