La coreográfa granadina Blanca Li.
La coreográfa granadina Blanca Li. / G. H.
Belén Rico

19 de junio 2024 - 14:37

Blanca Li se marchó con su familia de Granada a Madrid cuando tenía solo siete años y de la capital de España a la del mundo, Nueva York, con tan sólo 17 años. Allí aprendió todo tipo estilos de baile, desde hip hop hasta clásico, para descubrir un estilo propio, un sello Li que la ha caracterizado como bailarina y como coreográfa. Una marca de la casa que ahora imprime al último trabajo de su compañía, el ballet basado en la ópera barroca Dido y Eneas, una composición creada en 1688 por Henry Purcell sobre libreto de Nahum Tate.

La granadina presentará en su regreso al Teatro del Generalife su flamente ballet, estrenado en la Ópera de Dijon el pasado 7 de junio. Será por tanto la primera oportunidad para ver en España la coreografía, que cuenta con la música grabada de la ópera de Henry Purcell. "Hace un año y medio que monté la ópera de Dido y Eneas, una coproducción de los Teatros del Canal y el Liceo de Barcelona con Les Arts Florissants dirigido por William Christie. Él me llamó para que yo hiciera la puesta en escena y durante ese tiempo que trabajamos juntos me gustó tanto que me entraron ganas de montar un ballet. Esta pieza es un objeto totalmente diferente a esa ópera pero cuenta con su música. Les pregunté si podía grabarla en una de las representaciones y la última noche en el Liceo de Barcelona es la que luego he utilizado para crear el ballet", explica sobre el germen de esta obra.

Una historia de amor

Un ballet que es una historia romántica. "En una hora y cuarto los personajes atraviesan todos los estados posibles del amor: desde las primeras mariposas en el estómago a todo el juego de la seducción, el enamoramiento, la aceptación, la consumación y la traición para llegar hasta la muerte. Por eso es una obra muy emocionante y muy bella", cuenta Li, que en esta ocasión ha trabajado con diez bailarines "no para narrar la historia" sino para "evocar todas esas emocionesr".

Aunque cierto toque de humor es una característica de las piezas de la granadina, reconoce que esta ocasión el argumento se prestaba poco a ello, pero sí a la alegría. "Toda la primera parte del ballet es muy alegre porque el amor al principio siempre es así. Además tiene esa cosa del barroco, que es burbujeante y divertida. La obra empieza con el inicio del amor, que es como la primavera, con esa belleza y color, para ir entrando en un estado muy diferente porque va evolucionando hasta un final dramático", explica la actual presidenta del establecimiento público artístico de la Gran Sala de la Villette, en París. Un nombramiento del Ministerio de Cultura de Francia que asume cuando aún se está desarrollando su programación como directora de los Teatros del Canal de Madrid, cargo que desempeñó hasta diciembre de 2023.

Precisamente, tras la presentación de Dido y Eneas en el Festival Internacional de Música y Danza de Granada este viernes 21 de junio y su paso por el Festival Internacional de Teatro Clasico de Merida el 6 agosto, el ballet podrá verse en La Villette en octubre y en el Théâtre de Liège entre finales de diciembre y principios de 2025. Además, en 2025, el espectáculo se representará en el Palacio de Festivales de Cannes y en el Festival de Danza de Spoleto.

El sencillo montaje de Blanca Li, bañado por la iluminación de Pascal Laajili, cobrará según Li toda su dimensión con los cipreses y la luna del Generalife. En ese marco único, el público podrá adentrarse en un ballet desnudo de escengrafía en el que las emociones y el lenguaje corporal priman sobre la narración para crear una obra que promete ser poética y densa.

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