Agresión a una pareja gay en un bar de Belicena

Violencia homófoba

El Ayuntamiento ha activado el protocolo contra la homofobia tras el acto violento que tuvo lugar el pasado sábado en un bar de la localidad

La pareja ha denunciado los hechos ante la Policía Nacional

Agresión a una pareja gay en un bar de Belicena

El pasado sábado tuvo lugar una presunta agresión homófoba en un bar de Belicena, según denuncia Jesús, el de agredido. Sucedió en torno a las 20 horas del pasado sábado cuando un hombre comenzó a agredir a Jesús e insultarle en la puerta del establecimiento, según consta en la denuncia interpuesta ante la Policía Nacional y tras lo que el Ayuntamiento ya ha activado el protocolo contra la homofobia.

La agresión tuvo lugar mientras Jesús fumaba en la puerta del bar, relata el agredido, y charlaba con dos mujeres y de pronto el supuesto agresor le tiró al suelo. "Mi pareja cuando vio eso salió a socorrerle y le empujaron también", explica.

"Mientras yo hablaba con ellas fuera a mi pareja, dentro del bar, uno de los hombres le dijo que no le gustaba que el maricón de tu marido hablase con su mujer", relata Jesús.

Esta persona le tiró varias veces al suelo, lo que le ha ocasionado heridas en la mano, pierna y codo derechos, heridas en la cara y que se le cayera un empaste. Fue el camarero junto a un vecino quien socorrió a Jesús de su agresor para a continuación meterlo en el bar que el camarero cerró para parar la situación, señala el agredido.

Pero a Jesús también le amenazaron. Sucedió al rato de estar dentro del bar tras la agresión física, cuando el amigo del supuesto agresor entró al bar a pagar las consumiciones y le espetó que les iban a "quemar la casa y los coches, que iban a muerte a por nosotros si denunciábamos". Aún así la denuncia se interpuso ya que, explica Jesús, si le hicieran algo a él, a su pareja o a los coches o a los coches, necesitan esa denuncia para en ese caso, "demostrar que han sido ellos".

Los supuestos agresores son conocidos del pueblo, no amigos, pero relata Jesús que de vista sí se conocen del pueblo y aunque nunca se ha visto envuelto en ninguna otra agresión por su condición sexual, sí ha escuchado cómo les llamaban "mariquitas o maricones" pero no les dieron nunca mayor importancia porque no les afecta. Respecto a la agresión del pasado sábado, ni Jesús ni su entorno llegan a explicárselo.

Pero la historia de Jesús no ha terminado aún, la pasada noche tuvo que enfrentarse de nuevo a otra situación violenta. Sobre las tres de la mañana, señala, una moto pasó por su casa gritando "hijos de puta" lo que no hace más que aumentar la sensación de miedo por la que este hombre y su pareja atraviesan. "Tengo mucho miedo en el cuerpo", sostiene él que además dice que tiene que salir a la calle preocupado" por si estas dos personas toman represalias, cuestión de la que está seguro Jesús que pasará tarde o temprano.

El caso, además de en la Policía Nacional, también está en manos del Centro de Información de la Mujer y Jesús está siendo atendido por una psicóloga y por la asesora jurídica y se han trasladado los hechos al SAVA, Servicio de Asististencia a Víctimas de Andalucía.

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último

El maestro Juan Martínez que estaba allí

Juan Martínez existió