El Banco de Alimentos de Granada, una red de solidaridad en plena crisis del coronavirus

El alcalde de Granada, Luis Salvador, ha visitado esta mañana las instalaciones del Banco de Alimentos de Granada junto a la delegada de Políticas Sociales de la Junta de Andalucía, Ana Berrocal, y el concejal de Derechos Sociales del Ayuntamiento de Granada, José Antonio Huertas, para conocer in situ la logística y operativa de trabajo “en un momento muy complicado en que muchas familias sin ingresos o en vulnerabilidad, necesitan de esta red solidaria”.

“La crisis sanitaria derivada de la Covid-19 está dando lugar a otra de carácter socioeconómico que multiplica las necesidades sociales de la población, por lo que cada vez hay más familias con insuficiencia de recursos económicos para subsistir”, ha explicado Luis Salvador, quien considera que “en estas situaciones de emergencia social la colaboración entre las entidades públicas y privadas se hace más necesaria que nunca para optimizar los recursos existentes”.

El alcalde ha tenido palabras de gratitud para el Banco de Alimentos, voluntarios y donantes, “por su trabajo impecable”, así como para MercaGranada, “que está haciendo una aportación permanente e importante”, y para toda la sociedad granadina, constituida en “una inmensa red solidaria que tiene que ser más grande y seguir funcionando de manera más organizada si cabe”.

En este sentido, el primer edil granadino ha anunciado que próximamente convocará una reunión entre Ayuntamiento, Junta de Andalucía, Cruz Roja, Cáritas y otras entidades “para analizar las respuestas que se están dando a las nuevas demandas e impulsar más medidas y campañas que mejoren la situación con la colaboración ciudadana”.

Por su parte, la delegada de Políticas Sociales de la Junta de Andalucía, Ana Berrocal, también ha elogiado la labor de la entidad y ha recordado que “en el contexto de las medidas que la Junta de Andalucía viene adoptando para cubrir las necesidades básicas de la población que le permita vivir con dignidad, y conociendo la trayectoria que desarrolla esta entidad, el Gobierno autonómico ha decidido prestar su apoyo económico a esta labor a través de una subvención de un millón de euros para todos los Bancos de Alimentos de Andalucía, Ceuta y Melilla con cargo al programa presupuestario de 'Acción comunitaria e inserción' de la Consejería de Igualdad”.

Indalecio García, presidente de Banco de Alimentos Granada, ha recordado que el lenguaje de su entidad es siempre el mismo: “gracias, gracias, gracias”. Así, ha asegurado que “en una época triste como esta, para nosotros, el anuncio de la ayuda de la Junta de Andalucía es un notición que contribuirá a crear una unidad de gestión para centralizar las compras para el aprovisionamiento, lo que permitirá hacer previsiones como mínimo hasta finales de año y años siguientes, es decir, mirar al futuro con más serenidad”.

El concejal de Derechos Sociales, José Antonio Huertas, también ha aprovechado la visita para agradecer “no solo el trabajo de voluntarios de esta entidad con 25 años de implantación y que reparte 25 millones de kilos de alimentos al año; sino también la labor de todas las entidades sociales de la ciudad y los muchos voluntarios granadinos que trabajan denodadamente en colaboración con la administración para que el conjunto de la sociedad granadina salga de este momento difícil y supere los efectos de la pandemia”. José Antonio Huertas ha subrayado así la importancia de la colaboración público-privada y ha señalado que el Ayuntamiento, en coordinación con distintas entidades, reparte semanalmente alimentos que atienden las necesidades de un conjunto de más de 3.200 familias de toda Granada”.

La Federación de Bancos de Alimentos de Andalucía, Ceuta y Melilla atiende a 380.000 personas en la comunidad autónoma mediante las asociaciones que la integran, con implantación en todo el territorio andaluz, a través de 1.600 entidades sociales. Este marco de actuación le permite estar en contacto constante con las necesidades de las personas más vulnerables, valoradas profesionalmente. Actualmente, esta federación ha visto incrementada su demanda en un 25%, teniendo que realizar repartos de alimentación no previstos, de forma extraordinaria para ayudar a las personas con más dificultades.