Campaña de sanciones contra los rótulos ilegales en el Albaicín de Granada

Patrimonio

La Junta anuncia la apertura de expedientes sancionadores y advierte de que continuará por otras zonas protegidas de la ciudad

Ordenanza municipal con multas por grafitis y por los excrementos de perros

Mirador de San Nicolás, en el Albaicín, con la Alhambra como lienzo / Photographerssports
David Rodríguez

07 de julio 2023 - 11:01

Primeras multas de la Junta de Andalucía contra los negocios que tienen rótulos ilegales en el barrio histórico del Albaicín, en Granada. Sobre todo se está incidiendo en el entorno de la calle Elvira. La Delegación de Cultura ha iniciado una campaña para combatir las actuaciones ilegales, especialmente en el rotulado, llevadas a cabo en inmuebles ubicados en zonas donde existen monumentos. Advierte de que seguirá por otros entorno protegidos de la ciudad.

En el Albaicín se ubican varios lugares de interés patrimonial declarados Bien de Interés Cultural (BIC) como son la propia Puerta de Elvira, los Baños árabes de Don Hernando de Zafra o la Iglesia de Santiago, entre otros. Por ello, han procedido contra los trabajos que se llevan a cabo sin autorización en los entornos de estos Bienes de Interés Cultural, que son los únicos en los que la Administración autonómica tiene competencias de conformidad con la Ley del Patrimonio Histórico de Andalucía.

Se han iniciado los primeros expedientes sancionadores a los titulares de aquellos establecimientos que han llevado a cabo intervenciones sin contar con la preceptiva autorización administrativa de la delegación de Cultura. Las actuaciones ilegales consisten en la instalación de rótulos, paneles comerciales u otros elementos que no sólo no cuentan con la preceptiva autorización de la administración cultural, sino que además se han llevado a cabo sin respetar las determinaciones establecidas al respecto por el Plan Especial de Protección y Reforma Interior del Albayzín (PEPRI).

Este instrumento de planeamiento de protección prohíbe los rótulos a fachada, admitiendo sólo los paralelos a fachada en la planta baja, los cuales habrán de estar realizados con letra suelta según modelos tradicionales existentes en el área del Plan y no superando los cuarenta centímetros de lado.

El impulso de esta lucha contra las actuaciones ilegales es también consecuencia de la petición de la asociación de vecinos del barrio del Albaicín, que alerta de la situación existente en que se encuentra la zona con la continua instalación de establecimientos que no respetan las normas de estética urbana regulada en el planeamiento de protección.

En los próximos meses la delegación de Turismo, Cultura y Deporte extenderá esta campaña al entorno de otros BIC de la ciudad, para controlar las condiciones estéticas de los establecimientos, especialmente de los más discordantes con las normas de protección del Conjunto Histórico recogidas en los planes especiales de protección.

Reacción de la asociación

La Asociación de Vecinos del Barrio del Albaicín ha conocido la intervención que ha empezado a realizar la Junta de Andalucía desde la delegación de Cultura, con la intención de hacer frente a la masificación de carteles y otro tipo de rótulos que hay existente en muchas zonas del barrio histórico del Albaicín, declarado como Patrimonio Mundial.

El vocal de Urbanismo de esta asociación de vecinos, Pepe Bigorra, ha denominado este problema como "uno de los caballos de batalla" por la lucha existente que hay por el control de la cartelería.

Ante lo que describe la normativa, Bigorra ha declarado que "el plan especial describe claramente como debe ponerse la cartelería, con ciertas especificaciones. Por ejemplo, no pueden usar colores vivos. Pueden ser en chapa de acero recortada, como se ven de vez en cuando", y continua "tampoco se permite en banderola, es decir que el cartel sea perpendicular en la fachada, sino que tiene que estar adosado a la fachada, no puede tampoco superar una determinada distancia".

Tras la descripción que establece la normativa, el vocal de Urbanismo, ha señalado que "hay mucha cartelería, que efectivamente en el barrio pues no se cumple". Bigorra ha indicado especialmente la calle Elvira, sobre la cual lamenta que esté llena de carteles. En su mayoría, provenientes de tiendas y restaurantes de comida rápida, que tratan de llamar la atención del cliente y que claramente incumplen con lo establecido ya que, como ha incidido "son unos carteles enormes, de colores, con fotografías de la comida y todo eso está prohibido realmente por la normativa".

Bigorra ha hablado además de lo que en la Ley del Patrimonio Histórico de Andalucía, recibe la denominación de "contaminación visual de los centros históricos", que es de lo que trata todo este problema del Albaicín. Ha terminado señalando que esto "está muy regulado por la normativa vigente", y que "la administración no lo perseguía, no exigía su cumplimiento". Cuestión de la que señala que hay que estar de forma continua presionando para que la ley se respete.

La Asociación también pone el foco en el problema de movilidad que se vive en muchas zonas del Albaicín, señalando nuevamente la calle Elvira como uno de los sitios donde mayores problemas de este estilo se da.

Para los vecinos, hay zonas "donde no se puede caminar ni por la acera", mencionando la calle Elvira, donde señalan que en muchas ocasiones, entre los grandes grupos de visitantes, y los obstáculos existentes por cartelería o cargamentos de los comercios, "uno se tiene que bajar por la calzada para poder circular". También han querido señalar que este problema se da de forma bastante similar en el Paseo de los Tristes.

Se ha mencionado este problema, ya que si se cuenta con los barreras arquitectónicas que de por sí existen, añadiendo los impedimentos que se producen por el incumplimiento de las normativas, personas con problemas de movilidad tienen muy dificultosa su circulación por el barrio.

Ante esto, los vecinos han señalado que "en el Albaicin también hay personas ciegas y con problemas de movilidad y ya bastante difícil lo tenemos normalmente para que encima tengamos que ir haciendo una gimkana".

Respecto a la actuación de la administración, los vecinos reseñan que es muy reciente. "Hace 3 o 4 años sí se hizo una ordenanza y una vigilancia un poco más potente, en Calderería, que se respetó, pero al poco tiempo se empezó a invadir otra vez. Ante esto, ha lamentado que "se tiende a favorecer siempre al empresario, pero la verdad que el Albaicín se merece otra cosa, no puede ser que sea un mercadillo en plena calle".

Por ello, ante el conocimiento de la acción de la Junta, desde la Asociación de Vecinos del Barrio del Albaicín se espera que se actué como debería ser, que la administración empiece por hacer un control oportuno de su propia legislación y normativa, dejándose atrás una inacción que ha derribado en los problemas que se viven en el conjunto del barrio del barrio.

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