'Ciencia sin etiquetas' explicará conceptos científicos en Granada con guiñoles o golosinas

El Ayuntamiento de Granada ha puesto en marcha un nuevo programa educativo denominado ‘Ciencia sin etiquetas’, una iniciativa con la que pretende acercar el origen de las enfermedades a 500 personas atendidas por servicios sociales en centros para menores y mayores de la tercera edad. El proyecto, que desarrolla el Instituto de Parasitología y Biomedicina López-Neyra, perteneciente al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (IPBLN-CSIC) y ubicado en el Parque Tecnológico de Ciencias de la Salud, ha sido presentado esta mañana por la concejal de Educación, Encarnación González.

La concejal de Educación, Encarnación González, manifestó su satisfacción por la puesta en marcha de este programa divulgativo y apostó una vez más por la ciencia y la investigación, “especialmente por desarrollar políticas que faciliten el que los investigadores nacionales no se vayan fuera de España”.

En el acto de presentación, en el que también han intervenido la coordinadora del proyecto y vicedirectora del López-Neyra, Elena González Rey, y la directora de la Fundación Descubre, Teresa Cruz Sánchez, la edil ha destacado el compromiso de la iniciativa ‘Ciencia sin etiqueta’ con la inclusividad y la integración, garantizando que todas las personas de los colectivos beneficiarios puedan participar en los talleres que están adaptados a las posibles necesidades.

“Además, este proyecto tiene un fuerte enfoque de género e incrementa la visibilidad de las científicas granadinas. Cerca del 70% de las sesiones divulgativas estarán dirigidas por mujeres, destacando su contribución a la ciencia, y se incluirán contenidos especiales en febrero de 2024 para celebrar el Día de la Mujer y la Niña en la Ciencia”, según ha añadido.

A grandes rasgos, el nuevo programa consiste en que el equipo de investigadores e investigadoras del López-Neyra visitará una decena de centros granadinos de distintos distritos de la ciudad, para trasmitir conceptos científicos. En concreto, los divulgadores explicarán el origen celular y molecular de dos enfermedades. La primera autoinmune, como es la Esclerosis múltiple y la segunda parasitaria, provocada por un mosquito, como la leishmaniasis. Así relatarán, en 5 talleres sucesivos, las distintas fases que van desde la célula y el tejido hasta el proceso que ocurre en el organismo para llegar a la patología.

La novedad del programa reside en la forma de trasladar el conocimiento a estos públicos de forma sencilla y entretenida. Para ello utilizarán desde juegos de memoria que abordan enfermedades parasitarias y neurodegenerativas, hasta teatros de guiñol que explican el funcionamiento de las células inmunitarias, pasando por la elaboración de células con golosinas o pulseras para recrear mutaciones genéticas.

‘Ciencia sin etiquetas’, que se prolongará hasta junio de 2024, es un proyecto basado en la inclusividad y la integración, que no solo busca educar, sino inspirar a la ciudadanía para reconocer la ciencia como una herramienta valiosa y accesible. Por ello se ha diseñado como un proyecto que sirva como modelo para proyectos futuros dirigidos a otros colectivos diversos, minoritarios o con mayor dificultad de acceso a la ciencia. Además, pretende ser germen de conocimiento, ya que compartirá la metodología con los centros educativos para que puedan integrar estos talleres y conceptos científicos en sus planes de estudio.

‘Ciencia sin Etiquetas’ ha sido posible gracias a la colaboración de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología, F.S.P.-Ministerio de Ciencia e Innovación, y se desarrolla con el apoyo y la participación del Ayuntamiento de Granada -promotor de la Mesa por la Ciencia- que reconoce la importancia de la divulgación científica y su impacto en la comunidad local, y la Fundación Descubre, agencia especializada en la divulgación científica en Andalucía. El nuevo proyecto, que aspira a servir como modelo para iniciativas futuras, refleja también el compromiso de Granada con la investigación y la educación, ciudad reconocida en 2017 como ‘Ciudad de la Ciencia y la Innovación’.

Por último, González ha incidido en la dimensión del Granada como Ciudad Educadora y en el trabajo que desde el Ayuntamiento se realiza en este campo “desarrollando actuaciones que inciden positivamente en los procesos educativos de la ciudadanía y poniendo a su disposición recursos que favorecen sus interrelaciones con un medio cada vez más complejo y cambiante”.

En este sentido, se ha referido al programa educativo municipal ‘Acércate a la Ciencia’, en el que, para este curso 2023/24, han solicitado participar 71 centros docentes y 10.465 alumnos y alumnas.