Corte de servicio "indefinido" de los autobuses de la zona Norte a partir de las siete de la tarde por los actos vandálicos
Municipal
Las líneas 5, N5 y N6 se desvían desde la semana pasada para no pasar por un tramo de Casería del Cerro entre Joaquina Eguaras y Sánchez Cotán
El lunes habrá Junta de Seguridad para pedir refuerzo de Policía Nacional tras registrarse 50 incidencias desde noviembre
Situación límite en la zona Norte: el Ayuntamiento pide refuerzo para proteger los autobuses
El Ayuntamiento de Granada ya explicó la semana pasada la situación límite que se vivía en la zona Norte por los actos vandálicos que estaban sufriendo los autobuses urbanos y por consiguiente el riesgo para usuarios y conductores. También se informó entonces de la decisión del comité de empresa de Transportes Rober, que había solicitado el corte del servicio de los autobuses que pasan por la zona Norte desde las siete de la tarde mientras no se solucione la situación.
Y este martes en comisión de Movilidad la concejal Ana Agudo ha informado de esa interrupción de servicio a partir de las siete de la tarde. Una interrupción que será "indefinida" mientras persista la situación de inseguridad, por lo que ya se buscan soluciones y se ha convocado para el lunes la Junta Local de Seguridad para reclamar un mayor apoyo a la Policía Nacional y que se eviten estas situaciones, generadas por lanzamientos de piedras, entre otros, a los autobuses.
Los autobuses afectados son los de las líneas N5, N6 y 5.
El trayecto conflictivo es el comprendido entre Joaquina Eguaras y Fray Juan Sánchez Cotán. Desde finales de enero, se vienen produciendo actos vandálicos por parte de un grupo de jóvenes que apedrean los autobuses a su paso por esta zona, en el horario de tarde-noche.
Y aunque la Policía Local esta realizando acompañamientos a estas líneas de autobús cuando se produce esta situación de inseguridad, no se ha atajado la situación y se sigue produciendo de manera reiterada y a diario desde entonces.
Según informó el Ayuntamiento la semana pasada, estos incidentes vandálicos, que han ocasionado daños materiales a varias lunas de los autobuses, están produciendo un perjuicio a los vecinos de la zona para lo que las líneas de autobús son su medio principal de transporte diario, ya que los trayectos de estos itinerarios de están viendo modificados para evitar el paso por estas vías habituales.
Riesgo para conductores y usuarios y desvío de líneas
Este periódico ha tenido acceso al acta del pleno extraordinario de trabajadores que se celebró el 7 de febrero y donde por unanimidad se comunicaba la interrupción del servicio en estas líneas. Según el texto, ante la "inaplicación e ineficiencia del Protocolo de Vandalismo suscrito entre Transportes Rober y los trabajadores el 31 de octubre de 2018", y viendo que desde el 1 de noviembre del 2023 se están produciendo ataques a los autobuses en el tramo indicado, que se han acrecentado desde enero con "roturas de lunas, daños físicos a los usuarios y daños físicos y psicológicos a los trabajadores de las líneas afectadas", acuerdan interrumpir el servicio de las líneas 5, N5 y N6 en la parte de la calle Casería del Cerro en el trayecto entre Joaquina Eguaras y Fray Juan Sánchez Cotán.
El escrito del comité de empresa habla de "riesgo grave e inminente para la salud e integridad física de los trabajadores", por lo que el servicio se ha visto interrumpido desde el pasado jueves 8 de febrero de 19:00 a fin del servicio.
Como alternativa, la línea N5 continúa circulando por Joaquina Eguaras y no entra en Casería del Cerro. Desde Joaquina Eguaras sigue su recorrido habitual. Con las líneas 5 y N6 se utilizan los recorridos alternativos según el protocolo ya existente. En ese caso, la línea 5 está subiendo por Pedro Temboury y gira a Pintor Chavarito y de ahí a Sánchez Cotán para seguir su ruta. La N6 sube por Pedro Machuca y entra también a Pintor Chavarito para seguir su recorrido.
Más de 50 incidencias
El presidente del Comité de Empresa de Transportes Rober, José Manuel Roldán, ha explicado a Granada que desde el 8 e febrero se está suprimiendo el paso por la zona conflictiva y que van a seguir con este desvío hasta que se garantice la seguridad. "Nos fastidia haber llegado hasta aquí por los usuarios, que no tienen culpa, y les pedimos disculpas. Pero es por nuestra seguridad y la de ellos", asegura Roldán. De hecho, explica que en estos meses se han sumado más de 50 incidencias, con compañeros con procesos de ansiedad y un usuario herido.
Los trabajadores piden que Policía Local y Nacional refuercen sus servicios "para garantizar la seguridad en la zona".
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