"Menos es más", sobre todo en medicina
La Escuela de Salud Pública abre unas jornadas para mejorar la atención médica
La Escuela Andaluza de Salud Pública acoge un encuentro sobre el movimiento 'No hacer' que persigue mejorar la atención sanitaria como reducir el consumo de medicamentos
La Escuela Andaluza de Salud Pública (EASP) acoge desde hoy un encuentro de profesionales sobre el movimiento 'No hacer', que entre otros objetivos, persigue disminuir las actuaciones asistenciales que no se han mostrado efectivas, y reducir el consumo de medicamentos.
Esto es, qué no hacer para poder lograr lo mejor para el paciente y enfocar los esfuerzos en los mejores tratamientos. Pasando por redoblar la atención en los parámetros, casos y atenciones que sean necesarios para el paciente.
Javier García Alegría es director del área de medicina del hospital Costa del Sol de Marbella, médico internista y uno de los participantes en las jornadas 'No hacer' que explica que estas jornadas revisan la iniciativa 'No hacer', o sea, en medicina el “menos es más”.
Nace de la aplicación en España del proyecto Compromiso con la calidad de las Sociedades Científicas en España. En él han participado 50 sociedades científicas “donde se han elaborado listas de actividades que no tienen relevancia y que no han demostrado beneficio para los pacientes”.
En los simposios, que pretenden depurar estos malos hábitos en la asistencia sanitaria, explica García Alegría que sobre todo “se ha insistido mucho en ver qué se hace a nivel local en cada hospital y en cada centro de salud”, por tanto lo que hace falta es comparar en relación con lo óptimo.
“A mí me interesa generar este intercambio cultural porque es muy bueno para el propio paciente, para las familias y que entronca con los principios de la medicina de no hacer daño. Dejando de hacer cosas que no hay que hacer podemos hacer más cosas que sí hay que hacer”.
Entre los puntos más importantes aparecen “las pruebas diagnósticas en escenarios clínicos que no generan mayor información y no ayuda a la toma de decisiones”.
También la “utilización de determinadas técnicas o medicamentos que pueden causar directamente perjuicio para los pacientes” como por ejemplo el uso indiscriminado test de marcadores tumorales en población general”, lo que lleva a que muchas veces “hay un resultado de falso positivo que genera alarma e incertidumbre”.
Por otro lado aparecen el uso excesivo de los medicamentos, donde en la sanidad hay “múltiples ejemplos” como el uso de algunos de ellos en determinadas edades.
Un ejemplo es el uso de los antidepresivos por cualquier mal de la vida diaria, “contratiempos de la vida que todos tenemos como la pena asociada a la pérdida de un familiar o un amigo.
“No son necesarios porque la tristeza forma parte de los sinsabores de la vida”. En estos caso se usan antidepresivos cuando no está indicado, “como tomar benzodiacepina, sobre todo las personas mayores, como un hipnótico que puede causar muchísimos problemas”, señala García Alegría.
En cuestión de medicina general, una de las medidas es el sobre consumo de antibióticos, donde úlitmamente se incide con mayor intensidad.
“España es uno de los países de Europa con mayor consumo de antibióticos y por tanto mayor resistencia bacteriana. Esto ha habido que abordarlo y menos mal que en Andalucía hay un proyecto muy importante como el Pirasoa que está dando muy buenos resultados”, finaliza el doctor.
No hay comentarios