Fomento deja pasar el plazo para licitar el cambiador en la línea de Moreda

Granada/El primer trimestre de 2018 no ha sido la panacea ferroviaria prevista. La línea de alta velocidad Granada-Antequera sigue en fase de pruebas y no hay fecha para su inauguración, pese a que el Ministerio de Fomento defendió a capa y espada en su momento que estaría en funcionamiento en estos tres primeros meses del año. En este espacio de tiempo tampoco se ha cumplido la previsión de licitar las obras del cambiador en la línea de ancho convencional Granada-Almería, lo que permitirá en el futuro que los trenes estándar que llegan a la ciudad prosigan el viaje hacia Almería por la actual vía de ancho ibérico, evitando así la necesidad de cambiar de tren, lo que redunda en un aumento de la comodidad y el consiguiente ahorro en los tiempos de viaje. El ministro Íñigo de la Serna anunció a finales de enero que estas obras estaría licitadas en el primer trimestre de 2018, aunque un mes después sigue sin haber noticias de esta infraestructura.

El proyecto de construcción de un cambiador de anchos en Granada está finalizado y, según las últimas noticias, estaba siendo revisado por Adif con una inversión prevista para esta actuación de 6 millones de euros.

La instalación de un cambiador de ancho se ha proyectado en las inmediaciones de la estación de Granada, concretamente en el kilómetro 53+742,59 de la línea Moreda-Granada, ubicación que minimiza las afecciones a la explotación e instalaciones ferroviarias existentes. La longitud de las vías de acceso al cambiador permite que las composiciones en doble no invadan la vía general si tuvieran que pararse antes o después del cambiador.

En el tramo de vía existente que conecta la estación de Granada con el futuro cambiador de ancho es necesario el montaje de tercer carril y, por tanto, la sustitución de las traviesas y desvíos existentes por otros compatibles con la tecnología de vía de tres hilos.

Para poder albergar la vía del cambiador y sus instalaciones auxiliares, ha sido necesario proyectar el desplazamiento lateral de la vía de la línea Moreda- Granada casi dos metros hacia el este. "Esta actuación tiene como objetivo facilitar la conexión entre ambas capitales andaluzas y evitar los transbordos ferroviarios en la capital granadina", defendió a finales de enero el ministro de Fomento Íñigo de la Serna al anunciar la licitación de las obras.

Un cambiador de ancho es una instalación donde se realiza el cambio de ancho en un vehículo ferroviario para adaptarlo a un ancho de vía diferente. Los sistemas de cambio automático permiten a los trenes pasar de una línea con un ancho ibérico (1668 mm) a otra con ancho internacional (1.435 mm ) o viceversa, variando la distancia entre las ruedas, sin cambiar los ejes ni los bogies, de forma automática y mientras pasa el tren por la instalación. También es posible cambiar el ancho a otras medidas, como de ancho 1520 mm. en países bálticos al ancho internacional 1435. En España los puntos de cambio de ancho están situados en la frontera con Francia, y en otros lugares de la geografía española, donde coexisten líneas con diferentes anchos, entre las que se encuentran las nuevas líneas de alta velocidad.

De la Serna también anunció el pasado verano que el Gobierno invertirá 365,5 millones de euros en la línea de tren entre Almería y Granada que aportará una mejora "sustancial de la vía" que se adaptará al ancho internacional y posibilitará el tránsito de trenes de alta velocidad. En concreto se invertirán 80 millones de euros en la "renovación prácticamente integral" de la superestructura de los 181 kilómetros de vía, dividida en dos subtramos, de Granada a Moreda y de Moreda a Almería, explicó De la Serna en declaraciones a los medios tras una reunión con la Mesa de las Infraestructuras de Almería.

En este sentido precisó que "apenas el 15% " de las traviesas del tramo Granada-Moreda son aprovechables, mientras que en el Moreda-Almería sólo un 10% del carril y un 30% de las tablas son útiles. El ministro precisó que también se invertirán 75 millones de euros en la plataforma para reforzar las estructuras y suprimir las limitaciones de velocidad, entre otras medidas, y que otros 55 millones de euros se destinarán a la electrificación total de la vía y la renovación de las subestaciones. Otros 24 millones de euros serán para abordar las posibles afecciones de las instalaciones existentes y 51,4 millones de euros más para las instalaciones complementarias.