Golpe 'divino' y policial contra el autor del robo de 22 décimos de la Virgen de las Angustias

Granada/Hay quien dice que hasta para robar hay que innovar y tener imaginación. Esto fue precisamente de lo que tiró un ladrón para cometer sus delitos. Y es que ya que se pone uno a delinquir, por qué no saltarse, pero de forma literal, el Séptimo Mandamiento y cometer una de sus fechorías en la sacristía de la Basílica de la Virgen de las Angustias. Quizá por ello su 'castigo divino' haya sido ser pillado por la Policía Nacional.

A mediados del pasado agosto, el hermano mayor de la Hermandad de la Virgen de las Angustias de Granada denunció la sustracción de un total de 22 décimos de Lotería de Navidad, que estaban guardados en la sacristía de la Basílica de la capital granadina.

Con este botín en su haber, el ladrón se fue hasta la localidad sevillana de Dos Hermanas donde tiró de imaginación para perpetrar su siguiente robo: entró en el servicio de un bar de la localidad y seccionó el latiguillo del váter, con lo que provocó una inundación en el establecimiento. Gracias a ello consiguió distraer a los camareros, momento que aprovechó para hacerse con los 1.000 euros de recaudación que había en la caja registradora y huir.

Sin embargo, las cámaras de seguridad lo grabaron todo y la Policía Nacional consiguió identificar al malhechor -un conocido delincuente itinerante-, ante lo que puso en marcha un operativo especial para detenerlo que ha tenido su 'premio gordo' dos meses después, en la zona centro comercial de Dos Hermanas: el ladrón fue localizado y arrestado.

En ese momento, los agentes comprobaron que entre sus pertenencias portaba una ristra de décimos de Lotería de Navidad que estaban marcados: en su reverso tenían el sello de la Hermandad granadina.

Tras ello, comprobaron que correspondían a los décimos que habían sido robados en Granada, los cuales ya han sido devueltos a sus legítimos dueños, mientras que este ladrón, de 57 años, ha sido puesto a disposición judicial acusado de dos delitos de hurto.