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La Orden Hospitalaria de San Juan de Dios ha visto incrementado en un 33% el número de voluntarios jóvenes que se han sumado a esta actividad social desde que comenzara la pandemia hasta ahora. El responsable de Voluntariado de la Provincia Bética, Carlos Hernández, ha explicado que “el Estado de Alarma derivó en una restricción de movimientos que no ha logrado frenar el compromiso social de miles de personas que han brindado su apoyo y solidaridad a las personas que más lo necesitan, aunando generosidad y empatía, y pasando a la acción para contribuir a mejorar situaciones adversas”. Precisamente, las personas que en mayor medida han mostrado interés por ejercer el voluntariado en San Juan de Dios desde marzo hasta ahora son las que pertenecen al grupo de edad entre 18 a 40 años.
En el caso concreto de la Orden en Granada, el perfil de edad es incluso más joven ya que entre marzo y diciembre de este año, un 52% de las nuevas altas como personas voluntarias se encuentran en la franja de edad de 18 a 25 años respecto al 25% del año anterior.
En los últimos seis meses, este grupo ha pasado de representar un 27% del total de voluntarios a un 36%. El responsable de Voluntariado de la Orden ha valorado este dato con mucha satisfacción, “muchos jóvenes se han sentido conmovidos y motivados a sumarse a nuestra acción voluntaria. Adquirir el compromiso de querer cambiar el mundo desde el voluntariado es una muestra de que la juventud participa, se implica, es sensible, solidaria y comprometida, lo que se traduce en un muy buen síntoma a nivel de comunidad”.
El mayor crecimiento en voluntariado joven se ha producido en los centros San Juan de Dios de Granada, Ciempozuelos, Málaga, Sevilla y Jerez, donde la Orden Hospitalaria tiene diversos dispositivos sociales, sanitarios y sociosanitarios.
En este tramo de edad, al llegar a la Orden, las personas voluntarias han manifestado su disponibilidad a sumarse a la actividad voluntaria donde más necesaria fuera su colaboración, aquellos programas en los que la demanda y la necesidades sociales han crecido en estos últimos meses, como los de urgencia social y garantía alimentaria, es decir, todos aquellos relacionados con la entrega de alimentos, ya sea en lotes para las familias o en forma de menú diario para los adultos que acuden a los centros y comedores sociales de la Orden; o con la entrega de prendas y enseres de necesidad en las roperías. También se ha producido una gran participación en los programas de sensibilización y el de acompañamiento telefónico a personas mayores. La responsable del Área de Desarrollo Solidario y Voluntariado de San Juan de Dios en Granada, explica que “ha sido muy gratificante comprobar como los jóvenes se están volcado durante la pandemia tanto en la atención a los usuarios del Comedor Social, como en los servicios de reparto de alimentos o duchas, e incluso a través del acompañamiento a nuestros mayores de la Residencia de San Juan de Dios a través de video-llamadas y a los pacientes del Hospital San Rafael”.
A pesar de que este año ha tenido que reinventarse para continuar su actividad afrontando las medidas de prevención y seguridad propias de la pandemia, el voluntariado de la Orden Hospitalaria se ha mantenido activo en todas sus franjas de edad.
Las personas voluntarias mayores de 65 años, que representan un tercio del total, al ser consideradas sanitariamente personas de riesgo, no han podido acceder a los centros para continuar prestando su ayuda presencialmente. Sin embargo, en esta adaptación que la sociedad ha sufrido en muchos ámbitos, sí que han podido realizar su labor de acompañamiento gracias a las nuevas tecnologías, bien por teléfono o por videoconferencia. Además, han participado activamente en gestiones telefónicas de programas de urgencia social y garantía alimentaria, como la organización y gestión de citas de usuarios de la Obra Social, e incluso en la captación de fondos y recursos.
Carlos Hernández ha expresado el agradecimiento de la Orden hacia todo su Voluntariado, poniendo énfasis en su cercanía, “no han dejado de estar presentes donde más se les ha necesitado. Hemos sentido su fuerza transformadora y admirable espíritu de servicio en favor de las personas y los colectivos más desfavorecidos, compartiendo la solidaridad de muy diferentes maneras, incluso en los pequeños gestos. Si ellos no hubiesen estado ahí, las consecuencias habrían sido mucho peores”.
Antes de la COVID-19, la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios contaba con 1.165 personas voluntarias, y tras nueve meses, son 1.371 los voluntarios que participan activamente en 80 programas de ayuda y atención social en Andalucía, Extremadura, Canarias y Madrid. Esto supone un incremento de casi el 17 por ciento desde principios de 2020 hasta ahora.
“Esta suma de esfuerzo y compromiso se ha hecho aún más patente en los peores momentos de la pandemia. Lejos de apartar la mirada, han entendido que la solidaridad es el gran reto que tenemos por delante y han contagiado ese compromiso transformador solidario a su alrededor. Un motivo más de celebración en un día como hoy, en el que festejamos el Día Internacional del Voluntariado”, ha explicado Hernández.
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