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Granada/La crisis económica se ha encargado de demostrar que ni siquiera las empresas más prometedoras están a salvo. Eozen, la fábrica de palas y aerogeneradores del Marquesado, nació en mayo de 2007 con un futuro prometedor que se cumplió hasta que en 2009 comenzaron a surgir los primeros problemas, derivados de la crisis, el descenso de la demanda y un revés asociado con su proyecto más emblemático: la fabricación de un sistema de rotor con imanes asíncronos, del que la empresa de Ferreira posee la única licencia de patente, que permite una mayor eficiencia de los aerogeneradores con menor cantidad de viento. La imposibilidad de verificar la patente en España -es decir, de instalar los nuevos sistemas para comprobar su eficacia- y, por tanto, de comenzar a producir los nuevos aerogeneradores, sumieron a la empresa de Ferreira en una situación muy complicada.
Tanto que la plantilla, formada en los momentos de mayor carga de trabajo por más de 200 trabajadores, se vio reducida a únicamente 90 personas. Además, como consecuencia del descenso de la producción, comenzaron los retrasos en los pagos de los trabajadores. La situación llegó incluso al Parlamento Andaluz a finales de 2009, cuando el diputado autonómico del PP y alcalde de Guadix, Santiago Pérez -que hoy protagonizará una protesta ante la situación de la planta- decidió presentar una petición que instaba a la Junta de Andalucía a "aunar esfuerzos" para salvar la planta eólica de Ferreira.
La importancia de Eozen en el mapa de las energías renovables andaluz llevó a la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa a hacerse cargo de su delicada situación. "La empresa está ubicada en una zona muy importante para la Junta. De ahí que hayamos estado trabajando para reestructurar y remontar la empresa", explicó el delegado de Innovación, Francisco Cuenca, que aseguró que tras meses de negociaciones -en las que CajaGranada también ha tenido un papel fundamental- la viabilidad futura de Eozen está prácticamente asegurada.
El acuerdo alcanzado entre Innovación y la empresa Unión Eólica Andaluza (una sociedad formada por los principales promotores de desarrollo eólico de la región permitirá a Eozen, por fin, producir a gran escala los nuevos sistemas de aerogeneradores. "Hemos alcanzado un acuerdo por el que Unión Eólica Andaluza se compromete a instalar en un parque eólico de I+D los sistemas, lo que permitirá a Eozen mantener la licencia, verificar la tecnología y vender los rotores, que son su auténtica innovación", indicó Cuenca. Además, la sociedad eólica se ha comprometido a instalar aerogeneradores de Eozen "en un marco de unos 300 megawatios". Lo que equivale, según el delegado de Innovación, "a una carga de trabajo por encima de los 120 aerogeneradores, que asegurarían la producción de los próximos cinco o seis años y la recuperación de buena parte de los puestos de trabajo".
Por último, la Junta de Andalucía se ha comprometido con Eozen a elaborar un plan de viabilidad y reestructuración. Para ello, el primer paso ha sido la consecución de un aval financiero -que corre a cargo de CajaGranada- por valor de 1.150.000 euros "que permitirá sanear la empresa". Eso sí, Francisco Cuenca explica que este préstamo le ha sido concedido a Eozen con las siguientes condiciones: "el pago de las nóminas a los trabajadores, que ya están al día, el pago de la deuda de la empresa con la Seguridad Social y que cualquier reestructuración de la plantilla se haga de acuerdo con los trabajadores".
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