Luz verde para rehabilitar 270 viviendas en Granada y Motril
Obras
La Consejería y el Ministerio de Fomento acuerdan la reactivación de obras de mejora de las barriadas de Almanjáyar y Huerta Carrasco-Esparraguera
Granada/Un total de 270 viviendas de las barriadas de Almanjáyar, en Granada capital, y de Huerta Carrasco-Esparraguera, de Motril, serán rehabilitadas en virtud del acuerdo firmado por las carteras de Fomento del Gobierno central y de la Junta de Andalucía.
En concreto, en la barriada de Almanjáyar se procederá a mejorar 194 viviendas por un coste de 1.619.732,17 euros, desglosados en 855.439,30 euros que saldrán de la Consejería de Fomento, y 764.292,87 euros que pondrá el Ministerio.
De la misma forma, en Huerta Carrasco-Esparraguera, las obras se llevarán a cabo en 76 viviendas por un precio de 1.210.039,65 euros. 759.402,17 euros irán de parte de la Consejería y 450.637,48 euros del Estado.
Los acuerdos comprenden actuaciones en promociones de titularidad de la Agencia de Vivienda y Rehabilitación de Andalucía (AVRA), que el Almanjáyar renovarán en concreto inmuebles situados en la plaza Merced Alta y la calle Arquitecto Modesto Cendoya (1, 3 y 5).
En el caso de Motril, las actuaciones se llevarán a cabo en la plaza Venus, que también se reurbanizará junto a su entorno, y la calle Urano Pares.
Los inmuebles que se verán beneficiados por esta actuación están dentro las consideradas ARRU (Áreas de Regeneración y Renovación Urbanas) de Andalucía, que en toda la comunidad mejorarán un global de 723 viviendas.
Además de las dos barriadas de Granada y Motril, también se actuará en el centro histórico de Cádiz, el Polígono Sur de Sevilla, y dos núcleos en Jerez de la Frontera: La Constancia y San Mateo-Santiago.
La inversión total será de 8.156.623 euros, de los cuales la Consejería asumirá 4,7 millones, que se financiarán con fondos europeos FEDER y el Ministerio de Fomento 3,1 millones.
Este acuerdo recupera proyectos que se acordaron entre los años 2014 y 2015 y que, al no haberse ejecutado hasta ahora, corrían riesgo de perder la financiación si no se acordaba una nueva propuesta entre las administraciones.