Muere un niño en un incendio en su piso de La Chana: "Fue muy angustiante, se escuchaban gritos pidiendo socorro"
Sucesos
La madre del menor fallecido ha resultado herida grave a consecuencia del suceso
Los hechos ocurrían sobre las 3:15 horas en el barrio de La Chana, en la calle Circunvalación de la Encina
La Policía ha abierto una investigación
Granada/Un niño de seis años ha muerto en el incendio de su vivienda tras una explosión de gas, ocurrida en la madrugada de este lunes en la capital. Además, una mujer de 47 años, la madre de este menor, ha resultado herida y se encuentra en estado grave a causa del suceso. De momento se está tratando de localizar al padre, que no se encontraba en la vivienda, para comunicarle la triste noticia.
Los hechos ocurrieron por una explosión de gas causada por una fuga de una hornilla de cocina en mal estado, que habría liberado el gas butano de una bombona durante la noche. La Unidad Científica de la Policía Nacional ha abierto una investigación para tratar de esclarecer lo ocurrido. Según han informado los Bomberos de Granada, los hechos ocurrían sobre las 3:15 horas, en el barrio de La Chana, concretamente en el número 26 de la calle Circunvalación de la Encina.
Según el Jefe de Bomberos de Granada, Gustavo Molino, todo sucedió cuando la madre y el hijo se despertaron de madrugada para acudir al baño, siendo el momento de encender la luz de este el que ha provocado la explosión de gas, cuya onda expansiva afecta a ambos y lanza por los aires al menor varios metros. Este relato fue contado por la mujer afectada a los servicios de emergencia antes de ser trasladada al centro hospitalario.
La familia, de origen magrebí, residía en la vivienda como inquilinos, y según han informado el Ayuntamiento de Granada se encontraban atendidos e inscritos en el servicio de asistencia social municipal, y se había producido una situación de impagos de la renta acordada, aunque se desconoce si tenían una orden de desahucio. Los vecinos han confirmado que vivían desde hacía bastantes años en el edificio y que eran una familia normal.
En declaraciones a los medios, el alcalde, Paco Cuenca, que ha lamentado lo ocurrido y ha transmitido todo su apoyo a la familia, ha confirmado que la familia se encontraba en una situación "delicada" y recibía ayuda de la Concejalía de Servicios Sociales.
La mujer herida permanece ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital de Neurotraumatología de Granada con quemaduras en varias zonas de su cuerpo y su pronóstico es grave, aunque permanece estable según han informado a este periódico fuentes sanitarias. Por el momento no se plantea el traslado a la unidad de Quemados del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla.
El fuego se ha producido en una vivienda ubicada en una tercera planta de un bloque residencial, y más de una quincena de vecinos ha alertado al servicio de Emergencias 112 Andalucía de que había llamas y se habían producido varias deflagraciones en una vivienda.
Durante la intervención de los servicios de emergencia de Policía Local, Nacional y Bomberos, se ha procedido a la evacuación de unos 40 vecinos, dejando el bloque de viviendas completamente vacío, aunque los vecinos ya han regresado a sus casas.
El Centro de Emergencias Sanitarias 061 también ha evacuado a una persona mayor por prevención a un centro hospitalario y ha asistido en el lugar a un agente de Policía por quemaduras en una mano e inhalación de humo, aunque pudo continuar sus labores sobre el terreno y se encuentra bien.
La explosión no ha causado daños en el bloque
Gustavo Molino ha confirmado que, pese a la explosión de gas, el edificio no tiene daños estructurales, que ni siquiera los tabiques interiores de la vivienda quemada han sufrido daños, que el suceso se produce instantáneamente, y ha relatado como fue la actuación de los bomberos a su llegada al lugar.
La primera llamada se recibe a las 3:17 horas de la madrugada informando de un incendio, y durante el traslado se reporta que se había producido una explosión. "A través del vehículo de altura entramos en la vivienda, en la que estaba la inquilina del piso pidiendo auxilio, y ayudamos a los compañeros de Policía para que pudieran ponerla a salvo en el exterior".
"Al ser una deflagración, esta es una combustión muy rápida, y cuando nosotros llegamos ya encontramos puntos calientes y el humo que nos indica que ha habido una combustión importante. A partir de ahí buscamos a un niño, y localizamos el cuerpo sin vida varios metros alejado de la puerta del baño", ha relatado Molino.
Una vez las llamas fueron extinguidas y se realizó la ventilación necesaria, los propios bomberos son los primeros en sospechar de donde puede venir la deflagración y acuden a la cocina, donde comprueban que en la hornilla hay una bombona de gas, y un regulador estaba abierto.
"Cuando hay un escape de gas, la chispa puede ser cualquier cosa. Si la chispa o el punto de ignición se produce cuando el porcentaje de gas es elevado, puede ocurrir esa explosión, que es lo que ha pasado en este caso", ha valorado.
Tensión y miedo en el desalojo
Los vecinos del bloque fueron desalojados rápidamente por los servicios de emergencia, y desde los distintos edificios colindantes los vecinos grababan los hechos mientras avisaban a otros residentes y salían a la calle. Se vivieron momentos de tensión y pánico.
Águeda, la vecina del piso inferior al del suceso, que también ha resultado afectado por las llamas, aunque levemente y sólo en la terraza, ha contado a Granada Hoy que sintió la explosión, golpes y gritos en árabe y español pidiendo socorro.
"Escuché gritos de auxilio, testarazos para acá y testarazos para allá, y a ella que pedía ayuda. Ya después oí ruidos en las escaleras y vino la policía a ayudarme a salir, porque soy mayor y ya no me muevo como antes. Los bomberos echaron agua, y mis macetas míralas achicharradas, y el toldo quemado".
Marlyn vive en el bloque justo en frente del lugar de la explosión, y se levantó aterrada al escuchar los gritos de auxilio. "Subí la ventana y al ver que era lo que pasaba lo primero que vi fue el fuego de frente y fue angustiante".
"No sabía qué hacer, porque estábamos de frente y no sabía si teníamos que bajar o qué teníamos que hacer. Posteriormente, vimos todas las personas que estaban saliendo del bloque y se respiraba mucha angustia, mucho estrés y no sabíamos qué pasaba o quien estaba dentro", ha asegurado.
Por su parte, Marga, que vive en el bloque al otro lado de la acera, avisó a su hermano, residente del inmueble afectado por las llamas, tras despertarse al oír la explosión y ver las llamas saliendo de la vivienda afectada.
"Yo me puse a desbloquear el móvil nerviosa perdida, llamé a mi cuñada y le dije que su bloque que estaba ardiendo y que salieran y se vinieran con nosotros. Ellos no se enteraron. Veíamos a la gente desde aquí. A una persona mayor al lado justo del piso incendiado que se asomaba y le decían que no saliera, que se quedara allí. Mucha gente en los balcones asomándose y les decían que se quedaran porque bajar era peor, por el humo que los podía asfixiar", ha comentado.
Ambas vecinas han confirmado que tanto el menor fallecido como la mujer eran una familia tranquila y humilde, aunque no tenían trato con ellos. "Siempre la había visto con el carrito, de vista. Ella una muchacha normal, una persona normal. Yo, muchas veces he venido aquí a ver a mi hermano y le he abierto la puerta porque iba con el niño", ha comentado Marga.
"Yo los veía desde mi ventana en la pandemia, cuando salíamos a aplaudir a los sanitarios, e intercambiábamos algunas palabras. El niño un día me preguntó que donde estaba mi hijo y yo le dije que no tenía, y también me preguntaba por qué me maquillaba para salir al balcón a aplaudir. Eran una familia muy normal", ha asegurado Marlyn.
También te puede interesar
Lo último