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política | una nueva polémica enturbia el fin de año en Granada
Granada/Era una de esas mañanas previas al día de la Lotería de Navidad, en las que la actualidad informativa suele centrarse en presentación de proyectos solidarios e iniciativas propias de estas fechas o en los famosos balances de fin de año. La polémica del programa de empleo millonario, definitivamente perdido por el Ayuntamiento, se presentaba como el plato principal para la polémica en el último pleno de un 2019 cargado de tensión en el ámbito de la Plaza del Carmen. Y de repente una rueda de prensa del portavoz de Podemos-IU, Antonio Cambril, daba un vuelco, un giro de 180 grados, con la denuncia de que la Junta de Andalucía, lo que en términos de confrontación política en Granada se conoce como Sevilla, se quedará con la gestión económica del museo del Parque de las Ciencias a partir del próximo 1 de enero.
La bomba lanzada por Cambril, el experiodista que aludía a fuentes internas del Parque en relación a una reunión mantenida este miércoles, se podía verificar al rato y encendía de un momento a otro todas las alarmas en el Gobierno andaluz, que a lo largo de la tarde de ayer emitiría dos comunicados –uno de la Consejería de Hacienda (PP) y otro de Educación (Cs)– señalando por un lado que se trata de un cambio adoptado por el que habrá intervención directa en los asuntos financieros del museo granadino contemplado en la Ley de Presupuestos Andaluces para 2019 y que se hace con la intención de mejorar los sistemas de control y presupuestarios.
Por otro lado la Consejería de Educación negaría la mayor asegurando más tarde que "todo se mantendrá igual". Esto evidencia descoordinación entre estas dos áreas del Gobierno andaluz al emitir dos comunicados similares en la forma pero diferentes en el fondo y que apuntan a una lucha interna de poder entre el Partido Popular y Ciudadanos en el seno del Gobierno andaluz. A la vez que sitúa al PP con mayoría administrativa respecto a los naranjas en Granada, ya que tendrá control directo sobre las cuentas del Parque de las Ciencias además de haberse 'apuntado' la Alhambra y Sierra Nevada cuando se produjo el reparto. Todo, pese a que la intención de Ciudadanos pasaba por convertir el museo en una fundación al igual que ocurre, por ejemplo, con el PTS.
La polémica, que hoy será motivo de discusión en el último pleno municipal del año, va mucho más allá y tiene todas las trazas de convertirse en uno de los grandes culebrones políticos para este 2020 que entra. Primero, por el malestar que ya se puede testar entre la ciudadanía granadina ante lo que se asemeja a una centralización del poder en la Junta de Andalucía y más aún por el hecho de que el museo interactivo del Zaidín estaba ofreciendo unos datos de autogestión muy fiables y está consolidado como un gran activo turístico e investigador de la provincia con la fórmula del consorcio participado entre el Gobierno andaluz y el resto de instituciones (Ayuntamiento, Diputación, Gobierno, UGR) así como otros apoyos de carácter semipúblico o privado.
Pero, además supone la primera gran crisis de la Delegación del Gobierno de la Junta de Andalucía en Granada, que si bien cuenta con las explicaciones que dio la Consejería de Hacienda sobre la necesidad de mejorar la eficiencia y la eficacia económica de las entidades, esta modificación en el ámbito de la gestión del Parque de las Ciencias es un duro golpe a la línea de flotación de la 'Junta granadina' por haber basado la campaña de la oposición en criticar la gestión anterior de la Alhambra y Sierra Nevada, dos entes con los que se ha llenado la boca el PP durante años por estar controlados desde Sevilla y ahora se topan con este nuevo 'traslado' del Parque de las Ciencias a la capital andaluza, desde donde se tomarán las principales cuestiones de índole económico. Lo mismo ocurrirá con el Palacio de Congresos y el Consorcio Fernando de los Ríos, que pasan también a estar intervenidos por la Hacienda andaluza.
Según las explicaciones ofrecidas ayer por el área que lleva Juan Bravo en la Junta, esta modificación se la Ley de Presupuestos para el 2019, aprobada en el mes de julio, se estableció una modificación del régimen presupuestario de los consorcios del Sector Público Andaluz así como de las agencias públicas empresariales para confeccionar estados de ingresos y gastos, disponiendo así de un presupuesto limitativo y vinculante.
Es decir, que de ser autogestionado como funcionaba hasta ahora el Parque de las Ciencias ahora existirá una intervención directa de la Consejería de Hacienda para todo lo que tiene que ver con la gestión financiera y la emisión de cualquier factura. Desde este departamento de la Junta aseguraron que "se van a mejorar los sistemas de control y presupuestación" y a la vez se consolidan "los principios de economía, eficacia y eficiencia de las entidades del Sector Público Andaluz".
"En ningún momento se ha pretendido sustituir a los sistemas de gestión de la propia entidad, sino complementarlos", zanja el comunicado de Hacienda, que además añade que la Ley de Presupuestos "ha exigido la integración de la contabilidad presupuestaria y financiera del Consorcio en la Cuenta General de la Junta de Andalucía, y en su información contable".
Desde el Gobierno andaluz indicaron así que todos estos consorcios “deberán proceder a la grabación en el sistema contable y presupuestario de la Junta de todas las operaciones para dar cumplimiento a la Ley de Presupuestos"
Por último, señala en que “ninguna operación” de un consorcio como el del Parque de las Ciencias "se verá controlada desde Sevilla, en ningún caso” y concluye afirmando que “el sistema de control aplicable es el de control financiero de la Intervención General de la Junta, que se ejercerá mediante técnicas de auditoría a posteriori".
El portavoz de la confluencia Podemos-IU, Antonio Cambril, fue el que dio el primer jaque con su rueda de prensa por sorpresa. Según el líder del grupo de izquierdas, esta decisión se habría tomado en una reunión que tuvo la dirección del Parque de las Ciencias con responsables de las Consejerías de Educación y Hacienda, celebrada en la tarde del miércoles en el Parlamento andaluz.
Según la información de Cambril,a partir de ahora desde la sede central de la Junta de Andalucía se encargarán de la gestión de las nóminas, contratación, taquilla, actividades, relación con proveedores, alquileres, producción, compra y venta de exposiciones.
De este modo, Cambril subrayó que "el dinero que el Parque de las Ciencias genere irá a Sevilla, pierde la autonomía de la gestión, no se podrá reinvertir en aquello que se considere más pertinente, como se venía haciendo hasta ahora, y hará imposible la toma de decisiones rápidas y sencillas”.
Este nuevo modelo de gestión conllevará un "proceso burocrático" de una infraestructura considerada "el mejor parque científico de España” que se financia al 50%, “algo imposible en museos o pinacotecas, que muy raramente superan el 15% de autofinanciación", explicó el portavoz de Podemos-IU.
A juicio de Podemos-IU, el Parque de las Ciencias, fundado en 1995, constituye la "historia de un éxito", que ha pasado de 127 usuarios en el primer año hasta las 870.000 de 2018, firmado convenios internacionales, colabora habitualmente con la Agencia Espacial Europea, participa en más de 20 proyectos internacionales y produce y vende exposiciones de altísimo nivel.
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