La Policía Local de Granada vigilará las novatadas con drones

La Policía Local de Granada ha dispuesto en este mes de septiembre diferentes controles con objeto de que este inicio de curso se desarrolle sin incidencias. El pasado lunes regresaron a las aulas los matriculados en Infantil, Primaria y Educación Especial, cerca de 80.000 escolares. Ese mismo día estrenaron año académico los algo más de 46.000 estudiantes de grado de la Universidad de Granada (UGR). El próximo viernes día 15 será la jornada de estreno para Secundaria, Bachillerato, Formación Profesional, Enseñanzas Artísticas y Educación de Adultos.

En total, en estos días se reencuentran con la rutina académica miles de estudiantes y, para velar por el normal desarrollo de estas jornadas, la Policía Local ha puesto en marcha, a lo largo de toda la semana, un dispositivo especial, detallan desde el cuerpo. Dentro de ese dispositivo específico con motivo del inicio del curso se hará uso de la unidad permanente de drones, un equipo que permite vigilar desde las alturas. En esta intensa semana de septiembre, confirman fuentes policiales, "entre las cuestiones" que se controlarán con la unidad de drones están las novatadas, que -tal y como siempre se ha apuntado desde la Universidad de Granada- están prohibidas. Fuentes policiales explican que la unidad no se destinará exclusivamente a ese cometido, pero que está dentro de las diferentes acciones a controlar de forma más estrecha en estos días. Este medio aéreo ya se ha empleado en momentos clave como la celebración de la Semana Santa o vigilancia de puntos en los que se producen botellones. El servicio policial de vuelos no tripulados se emplea habitualmente en la gestión de tráfico en Granada capital, primera ciudad andaluza que dispuso la creación de esta unidad.

Como cada mes de septiembre, el Consejo de Colegios Mayores Universitarios ha hecho público a través de redes sociales un recordatorio sobre la repulsa que generan estos comportamientos y el hecho de que son objeto de sanción. Este curso el Consejo ha elaborado un decálogo, que ha sido difundido a través de las redes sociales, con el objetivo de explicar de nuevo que las novatadas son "actos de humillación" en los que se da una situación de "abuso de poder". Normalmente las víctimas son el estudiantado de primer año, los recién llegados. Este curso en la Universidad de Granada son 9.755 los alumnos matriculados en primero de grado. Este número -ligeramente superior al del pasado año por estas fechas, 9.662- variará conforme avancen las adjudicaciones que quedan pendientes.

El Consejo de Colegios Mayores recuerda en su decálogo que las novatadas están presentes en distintos ámbitos, y también "en la Universidad, en las residencias universitarias y en los colegios mayores". Granada cuenta con una amplia población universitaria procedente de otras provincias. De hecho, más de la mitad del estudiantado de la UGR (el 61% según los datos de la última memoria académica sobre el curso 2022/2023) es de fuera de Granada.

Para hacer frente a las novatadas, desde el Consejo se apunta a que su erradicación pasa por educar, sensibilizar y actuar y pide "tolerancia cero" sobre esta práctica, que "no puede considerarse como actos de integración". La acogida a los nuevos universitarios debe ser, apunta el Consejo, "sincera y cordial" y en el caso de que se den comportamientos humillantes se insta a los universitarios a actuar. "Si las presencias no las permitas", pide el decálogo, que recuerda que son hechos denunciables, que pueden ser constitutivos de delito y que pueden incluso conllevar sanciones administrativas o penales.

"Hay una prohibición clara"

En el caso de la Universidad de Granada, el régimen disciplinario para el estudiantado y el reglamento de convivencia, aprobados el pasado curso, recogen las sanciones que conlleva realizar novatadas. Esta práctica puede castigarse con hasta tres años de expulsión al ser consideradas faltas "muy graves".

El rector de la Universidad de Granada, Pedro Mercado, explicó que "tenemos nuestras normas" y dentro de los reglamentos universitarios "hay una prohibición clara de cualquier tipo de acto que tenga carácter vejatorio". Sobre este inicio de curso, Mercado apuntó que "nuestra obligación" es recordar tanto a la comunidad universitaria como a los colegios mayores y residencias que "son actos que deben ser progresivamente erradicados en su mínima y su máxima expresión".