"Queremos un sitio con esfervescencia científica"

Neuron sigue trabajando en tres grandes líneas. La histórica es la del descubrimiento de nuevas fórmulas o compuestos, desde la nada a la prueba en ratón, a las puertas de la fase preclínica. En ese momento, se buscan acuerdos para transferir los descubrimientos a empresas para que hagan las pruebas. Desde hace 5 años trabajan también en el diagnóstico, que es más rápido y un modelo de negocio que permite tener menos riesgos. Lo que hacen es diseñar métodos de diagnóstico (más sencillos al ser a través de sangre), como el Alz test su revolucionario sistema para detectar el riesgo de Alzheimer, una innovación a nivel mundial.

Por último, la tercera pata es ofertar a terceros las tecnologías que tienen, de forma que por ejemplo pueden estudiar si algo desarrollado por ellos puede servir para otras patologías como párkinson o alergia, por ejemplo, mediante acuerdo empresarial y económico.

Neuron también quiere potenciar la labor docente de forma que todo el edificio se pueda visitar por escolares, asociaciones, inversores, universidades... para eso han diseñado un sistema de pasillos con cristales para que se pueda enseñar qué se hace allí, qué se investiga. Además están abiertos a celebrar jornadas, talleres, reuniones,...

Quieren que haya "ideas", suyas o de otros. "Queremos un sitio donde haya esfervescencia científica, que no sea cerrado, que entre y salga gente, asociaciones de enfermos, haya jornadas, exposiciones, actos... de estar cerrado no surgen las sinergias. También queremos contacto con la Universidad. ¿Por qué no tener un sitio donde un estudiante pueda hacer un proyecto que después sea empesa? Igual surgen cosas, por eso hay que establecer puentes entre universidad, empresa y hospital. El espacio del Parque Tecnológico lo da pero hay que conseguir que las personas hablen", explicó Javier Burgos, director general de Neuron.