El Sindicato Unificado de la Policía reclama el cierre indefinido del CATE de Motril
Aseguran que cuenta con deficiencias en la red sanitaria, en la climatización y en el suministro eléctrico
Motril/El Sindicato Unificado de Policía (SUP) reclama el cierre del centro de recepción temporal de inmigrantes de Motril de forma indefinida al “no poder subsanarse todas las deficiencias que se presentan en dicho centro en materia de prevención de riesgos laborales, como puede ser la falta de suministro eléctrico continuo, red sanitaria y una correcta climatización”.
Desde el Comité Provincial del Sindicato Unificado de Policía de Granada aseguran, que tras una reunión mantenida con la superioridad, les han confirmado que es “imposible” arreglar todas las deficiencias que presenta el CATE de Motril, lo que, unido a la alerta roja por altas temperaturas, supone un “peligro” para la integridad de los inmigrantes y los funcionarios que allí se encuentran.
Por lo que, desde el SUP han solicitado que “de manera inmediata” se clausure el CATE, de forma que, una vez que “el grupo de inmigrantes que se encuentran en las dependencias de la dársena portuaria, no se vuelva a hacer uso del mismo hasta que se puedan asegurar las condiciones laborales y de habitabilidad mínimas por parte de la Jefatura Superior de Andalucía Oriental”.
De igual forma, entienden que de no realizarse el cierre, y en caso de que por tales motivos se produjese algún problema de salud o seguridad, las responsabilidades recaerían sobre la Jefatura Superior.
El centro de recepción temporal de inmigrantes tiene los días contados, ya que en un corto plazo de tiempo “se pondrá en funcionamiento el tercer centro de acogida en los últimos dos años, después del campamento que la UME instaló dentro de la dársena portuaria”. A falta de una confirmación oficial que indique cuando se empezará a usar este nuevo centro que el Ministerio del Interior está realizando con la construcción de un nuevo módulo con mejores prestaciones y mayor capacidad, indican.
Una construcción que empezó hace varias semanas, en una zona de acceso restringido y que se encuentra situada en el interior del puerto de Motril, en la parte final del muelle de Levante, muy cerca del actual CATE y donde habitualmente desembarcan las guardamares de Salvamento Marítimo, por la gran altura que tienen.
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