La Universidad de Granada pide que la Ley de Convivencia Universitaria prevea medidas cautelares para casos graves

La rectora de la Universidad de Granada, Pilar Aranda, se felicitó por el desarrollo de la tramitación de la nueva Ley de Convivencia Universitaria, que ya ha pasado por Consejo de Ministros, ya que "cubre un vacío" normativo. La anterior norma, de 1948, había quedado claramente desfasada.

Tras la firma entre la Universidad de Granada, Gimnasios VivaGym y Fundación Adecco de la cátedra de investigación para fomentar la integración laboral de personas con discapacidad a través del deporte, Aranda indicó que la valoración que hace de la nueva ley es "positiva" ya que establece un marco "preventivo". Sin embargo, indicó que se trabaja en el seno de la Conferencia de Rectores (CRUE) para "enriquecer" el texto. Entre las aportaciones sugeridas por la rectora está "que se puedan tomar medidas cautelares". Estas se destinarían a situaciones "de urgencia" y "muy graves", como violencia psicológica o física o denuncias reiteradas, enumeró Aranda, que expresó su preocupación por los "discursos de odio".

Sobre el inicio del curso, explicó que hay centros que comenzarán las clases "cien por cien presenciales" y que en aquellas escuelas o facultades donde no se puedan mantener las medidas, se iniciarán las clases el próximo día 13, lunes, con "un aumento sustancial de la presencialidad" con respecto al pasado curso, cuando la Universidad dio inicio a las clases bajo el formato semipresencial. Sobre la normativa a aplicar este curso, Aranda expuso que desde CRUE "hemos solicitado con urgencia" que se revisen las medidas y se tenga en cuenta el alto porcentaje de población vacunado y la tasa de incidencia del Covid actual.