La Universidad de Granada prevé crear en dos años un gran centro científico vinculado al acelerador de partículas

El acelerador de partículas al que Granada opta dejará huella aunque la candidatura provincial no salga adelante. La Universidad de Granada prevé construir en el plazo de dos años un centro de investigación vinculado a la infraestructura científica que forma parte de un proyecto internacional que prevé dar a luz un nuevo modelo energético. Se construirá en Escúzar, municipio donde están los terrenos en los que se construiría el IFMIF Dones si Granada resulta la elegida. Se levantará en una parcela de 4.500 metros cuadrados y contará con 3.500 metros cuadrados construidos, según detalló el vicerrector de Investigación y Transferencia de la UGR, Enrique Herrera, en el webinario de la serie ConCiencia del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (Ciemat) desarrollado hoy.

El evento contó con la participación del director general de Ciemat, Carlos Alejaldre; Enrique Herrera; María Teresa Domínguez, directora del Área de Negocio Proyectos Avanzados e I+D de Empresarios Agrupados; Javier Díaz, catedrático de Universidad Departamento de Arquitectura y Tecnología de Computadores de la Universidad de Granada; y Ángel Ibarra, jefe de División Tecnología de Fusión del Ciemat como moderador de la mesa. El evento estuvo presentado por la rectora de la UGR, Pilar Aranda, y la secretaria general de Universidades, Investigación y Tecnología de la Junta de Andalucía, Rosa María Ríos, que expuso que prevé que en dos semanas se firme la creación del consorcio ya aprobado tanto por la Junta de Andalucía como por el Gobierno de España.

Según explicó el vicerrector, el centro de investigación UGR-IFMIF Dones “puede tener un gran efecto de atracción” para investigadores de áreas que pueden vincularse al proyecto internacional. Uno de los elementos que se destacaron del acelerador como clave como motor de ciencia es la posibilidad de que entorno se desarrollen nuevos campos, desde el desarrollo de materiales a investigación médica relacionada, por ejemplo, con el cáncer, según expuso Herrera.

Además de este gran paso de un centro de investigación, la UGR ya ha realizado “acciones concretas”, en palabras del vicerrector, como la creación de dos laboratorios, uno de realidad virtual y otro en el que se desarrollan sistemas de control. Además de concretar las primeras ofertas de empleo relacionas con el proyecto. Estos laboratorios actualmente se encuentran el la antigua Facultad de Ciencias de la Salud.

En cuanto al centro de investigación, éste se ubicará en Escúzar y contará con dos edificios: una nave donde se realizarán trabajos relacionados con los prototipos y un segundo espacio donde irán los laboratorios. El proyecto “está presentado a la Junta” de Andalucía, que participa al 50% junto con el Gobierno, en el consorcio que gestiona la candidatura de Granada. Además de esta infraestructura de la UGR, Herrera indicó que el Ciemat contará con otros edificios en la parcela.

Además de en las infraestructuras, se trabaja en dos programas para contar con personal que desarrolle el proyecto. Se prevé la incorporación de quince investigadores en este año y se desarrollará un programa de becas predoctorales, diez contratos que se prevé se inicien en enero de 2022. Cada uno de estos predoctorales estará supervisado por un investigador de la UGR y otro del Ciemat. Estas acciones cuentan con una financiación de 4,2 millones de euros, de los que la UGR aporta algo más de 430.000.

El director general del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas, Carlos Alejaldre, recordó la magnitud del proyecto en el que está embarcada la provincia de Granada. España fue candidata en su momento para albergar el ITER, que permitirá desarrollar un nuevo modelo energético, pero para desarrollar este “proyecto faraónico” se necesita demostrar la viabilidad científica de la iniciativa. Ahí, en la fase de demostración, España cuenta con la baza de Escúzar, donde se prevén validar los materiales que se emplearán en los futuros reactores de fusión. Alejaldre destacó la trayectoria desarrollada hasta ahora por España dentro de la investigación en fusión y la “colaboración” entre los actores, públicos y privados. “La experiencia obtenida” en los años en los que se trabajó en la candidatura de ITER ha propiciado que se materialicen mil millones en contratos industriales, explicó Alejaldre.

La directora del Área de Negocio Proyectos Avanzados e I+D de Empresarios Agrupados, María Teresa Domínguez, en la mesa redonda desarrollada dentro del webinario, expuso la singularidad del Ciemat como organismo que también “ha pensado en la industria”. Especificó que actualmente hay 200 personas trabajando en ITER y Dones “con contratos muy relevantes” y el interés en que la fase del proyecto a la que aspira Granada efectivamente se levante en Escúzar. Asimismo, ofreció colaboración con a UGR tanto en las becas como en la selección de personal y transferencia desde Empresarios Agrupados.

Javier Díaz, por su parte, destacó que “en estas grandes infraestructuras nada es sencillo” y reconoció que “es increíble que haya una posibilidad real” de que el acelerador se construya en Granada, opciones que se sustentan en el desarrollo de un proyecto en el que se han trabajado desde lo público y lo privado.

Ríos, en la presentación de la sesión, expuso los pasos dados desde la Junta de Andalucía en favor de la candidatura de Granada. “Es obvio que tendrá una enorme relevancia internacional” el desarrollo del proyecto, afirmó, para insistir en que es una “acción estratégica” de la Junta que, con el Gobierno, aportarán 34,1 millones de euros.

Pilar Aranda, por su parte, incidió una vez más en que “ya hemos ganado todos” y destacó el papel que el IFMIF Dones puede desarrollar en el entorno y en el modelo productivo.