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El Abba Granada, el hotel que ocupa desde hace años el histórico edificio de los sindicatos en la Avenida de la Constitución, se ha puesto a la venta. Pero, aunque la propiedad pase a otras manos, el hotel seguirá siendo el Abba de Granada. Es decir, que aunque la cadena hotelera ceda la propiedad del hotel, mantendrá la gestión del alojamiento.
El hotel granadino, según adelantaba ayer el periódico económico Cinco Días, forma parte de una operación de venta destinada a conseguir liquidez y, así, reducir las deudas. El paquete, que también incluye al establecimiento que la cadena tiene en Berlín y a otro que gestiona en Sevilla, permitiría a la empresa hotelera ingresar alrededor de 90 millones de euros. Y sin perder la gestión de los hoteles, ya que tras la transacción Abba alquilará los establecimientos al nuevo propietario. El diario apunta que la venta se ha puesto en manos del broker británico Fan Worldwide Limited, que tiene previsto realizar la operación en bloque y con un contrato de arrendamiento de un mínimo de 10 años con una subida anual del 3,5%.
El director comercial del grupo hotelero, Ramón Regás, confirmó ayer que se trata de una operación financiera, lo que significa que "la empresa quiere obtener financiación y saldar las deudas".
Eso sí, en principio nada cambiará en el hotel granadino. Ni los trabajadores ni los clientes notarán el cambio. Así lo aseguró ayer el director del hotel granadino, Joseba Villate, que señaló que, puesto que la gestión del hotel seguirá en manos del grupo Abba, la operación financiera no tiene por qué trasladarse al día a día del establecimiento. "La gestión, la forma de trabajar, los procedimientos... Todo seguirá siendo lo mismo. La diferencia es a que en lugar de pagar una hipoteca, pagaremos un alquiler".
Villate, además, apunta que la venta para el posterior alquiler (operación conocida como sale & leaseback) es una práctica que entra dentro de las posibilidades de muchas cadenas hoteleras, que tienen que adaptarse a las nuevas circunstancias y a la falta de financiación. Dentro del propio grupo Abba no sería la primera vez. Ya lo hizo con el Abba Castilla Plaza de Madrid (cuya venta le permitió ingresar 33 millones de euros) y con el Abba Londres, que vendió por 40 millones de euros.
Los tres hoteles que se incluyen dentro de la nueva operación de venta tienen algo en común. Los tres son de cuatro estrellas, de nueva construcción y con una ubicación envidiable. El establecimiento de Berlín, que cuenta con 214 habitaciones, se encuentra en pleno centro de la ciudad germana. El de Granada dispone de 136 estancias y está en la Avenida de la Constitución. Y el de Sevilla, con 137 estancias, está situado en el barrio de Triana. De ahí que el cuaderno de venta de los establecimientos -según publica Cinco Días- defina a estos alojamientos como activos "ideales" para los inversores, capaces de garantizar unos ingresos fijos durante 10 años por el alquiler del inmueble que realizará el propio grupo Abba.
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