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Granada/El estudio informativo encargado por el Ministerio de Fomento para estudiar el soterramiento del AVE en Granada tiene otra finalidad paralela: analizar las opciones para la circulación de mercancías del Corredor Mediterráneo sin interferir en la circulación de los trenes de pasajeros. Así se recoge en el pliego de prescripciones técnicas del estudio para la integración de la Alta Velocidad en Granada, lo que deja la puerta abierta a que las infraestructuras para el mantenimiento del AVE y la estación de mercancías pudieran quedar ubicadas en un solar próximo a Mercagranada, como recoge el proyecto del arquitecto granadino Juan Pablo Canales que apadrinó la Marea Amarilla. Este punto es fundamental en el futuro económico de la provincia después de que Granada haya sido incluida en el proyecto de la red de autopistas ferroviarias del Corredor Mediterráneo.
El fin de este borrador, que tiene el horizonte de 2030 como fecha para estar en funcionamiento, es que los camiones abandonen las carreteras y viajen en trenes especialmente acondicionados para este fin, lo que sería un salto cualitativo en el tráfico comercial en Europa. En este sentido, el Ministerio de Fomento publicó ayer en el BOE la convocatoria dirigida a los interesados en la explotación de los servicios de las autopistas ferroviarias, en los ejes Atlántico y Mediterráneo. Se trata de una llamada a exportadores y transportistas para que se posicionen respecto a un proyecto que, por ejemplo, permitiría a un camionero subir su trailer a un vagón, viajar en tren a Alemania de un tirón sin los obligatorias parones para descansar y apearse a 50 kilómetros de Hamburgo para seguir por carretera.
España y Francia colaboran en el marco de un grupo de trabajo, constituido en Madrid el 9 de octubre de 2015, para la realización de los estudios y las acciones comunes necesarias para el establecimiento de servicios internacionales de autopistas ferroviarias de larga distancia sobre los ejes Atlántico y Mediterráneo.
Dentro de los trabajos previstos en la hoja de ruta aprobada, se acordó en la reunión celebrada el día 27 de marzo de 2017 en Vitoria, la realización de sendas convocatorias conjuntas de manifestaciones de interés dirigidas, por un lado, a los diseñadores y fabricantes de material rodante que ya tuvo lugar en 2017, y, por otro, la actual dirigida a los interesados en la explotación de servicios de autopistas ferroviarias en ambos ejes, el último empuje a un proyecto que revolucionará el transporte de mercancías.
Las autopistas ferroviarias son servicios de transporte ferroviario de mercancías sobre las líneas existentes de la red ferroviaria, que transportan trailers de carretera o semirremolques utilizando vagones especializados. Son un segmento del transporte combinado ferrocarril-carretera adicional al de contenedores marítimos y cajas móviles. Estos servicios son complementarios y, a veces, en competencia con el transporte de mercancías por carretera, en la medida en que su uso por los cargadores no requiere obligatoriamente de una adaptación específica de los camiones.
Según se detalla en el convocatoria de manifestaciones de interés de los Gobiernos francés y español, la carretera constituye el modo de transporte más utilizado para mercancías, ya que el flujo de mercancías transportadas por carretera entre la Península Ibérica y los países de la UE representa el 52% de la carga total.
Sin embargo, las políticas europeas y nacionales establecen como objetivo mejorar la sostenibilidad y durabilidad del transporte. Estas directrices dieron como resultado el Libro Blanco sobre el Transporte de 2011 de la Comisión Europea, que establece un objetivo de transferencia modal del 30% de la carretera hacia modos de transporte sostenibles para largas distancias (más de 300 km).
A nivel de español, el Plan de Infraestructuras, Transporte y Vivienda 2012-2024 (PITVI) promueve, respecto al transporte de mercancías, la potenciación de los modos más eficientes y menos agresivos con el medio ambiente. Para incentivar el transporte intermodal, el PITVI contempla la potenciación, en el marco de los programas nacionales específicos, la promoción de este transporte y la creación de nuevos servicios de autopistas ferroviarias, según se recoge en este documento. Y Granada es una de las ciudades españolas que aparecen en este proyecto que, cuando cristalice, reducirá de manera drástica el tránsito de camiones a su entrada en la capital.
En el documento se especifica que las terminales de las autopistas ferroviarias serán "áreas especialmente equipadas y preparadas para la carga y descarga y el estacionamiento de los vehículos de carretera y, en caso necesario, de otras unidades de transporte intermodal transportadas". En este sentido, la explotación de estas infraestructuras pueden ser realizadas por el operador del servicio -Adif en el caso español- o por otros intervinientes. En territorio español, el Ministerio de Fomento ha realizado un Estudio para el desarrollo de Autopistas Ferroviarias en la Península Ibérica, en el que se analizan los tráficos potencialmente captables desde diferentes orígenes o destinos para la ubicación de las terminales.
A expensas de que llegue el AVE este año a Granada, que se encuentra en periodo de pruebas desde el pasado 1 de diciembre, y de la ejecución del soterramiento de las vías y de la Variante de Loja, el futuro del ferrocarril en Granada ensancha sus expectativas con la autopista ferroviaria del Corredor Mediterráneo, un proyecto a 12 años vista pero que sería un nuevo impulso para la economía de la provincia.
Granada formará parte del Corredor Mediterráneo como punto de paso obligado al puerto de Algeciras. Y si los planes del Gobierno llegan a buen puerto estará incluida en la red de autopistas ferroviarias del Mediterráneo. Ayer se publicó en el BOE la convocatoria a los exportadores y transportistas para abrir una negociación y conocer el uso que tendría esta infraestructura. En principio, que los camiones viajen a Europa en tren supone grandes ventajas, desde la emisión de gases contaminantes a la reducción de los tiempos, ya que el tren circula a mayor velocidad que los 120 máximos permitidos en España, supera mejor las nevadas y no es necesario que los conductores realicen los descansos obligatorios en el transporte de mercancías por carretera. Según los planes del Gobierno, Granada estaría conectada a la autopista ferroviaria en 2030, aunque queda por delante la negociación con el sector.
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