El 'Cometa del Siglo' brilla sobre el cielo de Granada

Jesús Carmona, divulgador astronómico: "Nosotros siempre miramos al cielo porque nos apasiona, y cuando lo contamos, hay mucha gente que se une a esa curiosidad. Mirar el cielo es algo profundamente humano"

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El cometa Tsuchinshan ATLAS sobre el Hotel Alhambra Palace el pasado 29 de septiembre
El cometa Tsuchinshan ATLAS sobre el Hotel Alhambra Palace el pasado 29 de septiembre / Jesús Carmona (@AstroIncognito)

Granada/Se le llama el Cometa del Siglo por su grado de acercamiento a la Tierra y su tamaño, que lo hacen muy prometedor para ser observado a simple vista por la población. Sin telescopios y sin prismáticos, al anochecer o al amanecer, un punto brillante con una aureola tras su paso destaca en el cielo de Granada. Se trata del Tsuchinshan-ATLAS, un cuerpo celeste que está siendo el fenómeno astronómico del año, y que estos días se puede contemplar desde el firmamento granadino. Las primeras imágenes nítidas del objeto las ha publicado el astrónomo Jesús Carmona, conocido en redes como @AstroIncognito, tomadas el pasado domingo en el crepúsculo, con un marco inconfundible: la cúpula del hotel Alhambra Palace.

Seguimiento internacional

La primera publicación del experto data del pasado jueves 26, cuando solo con unos prismáticos observó "nítidamente" el paso del cometa "a 6° sobre el horizonte en Granada imbuido en las luces del amanecer". "A veces lo que más te emociona no se corresponde con ninguna espectacularidad en foto", añade el experto. Días después, lo que el jueves era "en la foto sólo un prometedor punto", el domingo ya era una imagen casi perfecta en la que se distinguía la cabeza y la cola del cometa, que se veía a 6'5 grados de altura en el horizonte granadino.

El cometa Tsuchinshan-ATLAS fue observado por primera vez de forma, podría decirse que reciente, el 9 de enero de 2023 por el telescopio del Observatorio de la Montaña Púrpura (Observatorio Astronómico de Zijinshan) en China. Sin embargo, no se siguió realizando seguimiento del mismo y se dio por desaparecido dos semanas después. Fue días más tarde, el 23 de febrero del mismo año, cuando fue captado de nuevo pero por el telescopio Atlas en Sudáfrica, que fue quien confirmó que se trataba de un cometa. "Basado en el sistema de nombres de cometas, el cometa recibió los nombres de ambos observatorios y se denominó oficialmente C/2023 A3 (Tsuchinshan-ATLAS)", explica la web especializada Starwalk Space.

Carmona señala que la luminosidad de este cometa ha sido "decepcionante" hasta ahora, aunque se espera que mejore a medida que se acerque más al Sol. "No es un cometa periódico, y había una gran expectativa de que fuera mucho más brillante. No lo ha sido, aunque al menos es perceptible, mucho más que otros cometas que no alcanzamos a ver", explica el experto.

Actualmente, el cometa se encuentra en el horizonte este, visible al amanecer. Se espera que su máximo brillo se produzca entre el 9 y el 12 de octubre, cuando estará a unos 60 millones de kilómetros del Sol. Sin embargo, a medida que avanza hacia el astro, su visibilidad en esta fase irá disminuyendo. "Su cola es muy recta y con un telescopio se puede apreciar mucho mejor, pero en estos días será cada vez más difícil de ver", aclara el divulgador granadino.

Instrucciones para no perdérselo

Después del 12 de octubre, el cometa Tsuchinshan-ATLAS se desplazará hacia el oeste, y será observable durante la puesta de sol y el crepúsculo, cuando aparecerá más alto en el horizonte. Carmona subraya que, aunque se espera que no pierda demasiado brillo, lo ideal es utilizar prismáticos o incluso telescopios. "Estos días lo he podido ver a simple vista, pero con unos prismáticos de 20 aumentos se percibe mucho mejor", añade.

Para aquellos que deseen capturar el cometa en una fotografía, Carmona recomienda usar un trípode para evitar temblores y ajustar la exposición de la cámara para captar el brillo del cielo nocturno. "Es crucial tener un horizonte despejado y un cielo sin contaminación lumínica. Además, ajustar la exposición en el móvil permitirá que los brillos del cielo destaquen", aconseja.

El misterio de los cometas y su relación con el ser humano

Más allá del espectáculo visual, Carmona reflexiona sobre la importancia de observar el cielo y cómo esto conecta a las personas con algo más grande. "Nosotros siempre miramos al cielo porque nos apasiona, y cuando lo contamos, hay mucha gente que se une a esa curiosidad. Mirar el cielo es algo profundamente humano", señala el divulgador, recordando cómo el cielo ha sido fuente de inspiración durante siglos.

Para él, la creciente contaminación lumínica es un reto para la observación astronómica: "Estamos perdiendo el cielo, y muchas personas se están dando cuenta de que ya no se ve como debería".

El mejor momento para observar el cometa Tsuchinshan-ATLAS será entre el 9 y el 12 de octubre, coincidiendo con su máxima aproximación al Sol. Después de esta fecha, se trasladará al horizonte oeste, y su observación será ideal al atardecer y durante el crepúsculo, sobre todo entre el 13 y el 20 de octubre. "Aunque no sea el 'cometa del siglo' como se le había llamado, es un fenómeno que merece ser observado", concluye Carmona.

Jesús Carmona, arquitecto de profesión, destaca como observador y como un divulgador activo de la astronomía en la ciudad de Granada. A través de sus redes sociales, así como en charlas en centros educativos y programas de radio, acerca el fascinante mundo del cosmos a los granadinos. Para él, la astronomía es una forma de conectar a las personas con el universo que los rodea y despertar la curiosidad por los misterios que habitan más allá de la Tierra.

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