Puerta Real-Gran Vía: el nuevo eje de la comida rápida en Granada

El eje Puerta Real-Reyes Católicos-Gran Vía es el Centro neurálgico de Granada y está en transformación adaptándose cada vez más al turista, que tiene en estas tres vías un punto de paso obligado en sus rutas por la ciudad. Y si antaño fueron espacios para las mejores tiendas de la ciudad, para las últimas marcas y residencia de familias de alto poder adquisitivo, hoy estas tiendas cada vez son menos y se sustituyen por establecimientos de comida rápida, tiendas de souvenirs y los pisos ya no acogen casi viviendas sino oficinas y en un futuro, pisos turísticos, para lo que hay varios proyectos.

Los apenas 400 metros que separan Puerta Real de Gran Vía (a la altura de la Catedral, el 'límite' para el turista), se van a concentrar tres grandes establecimientos de comida rápida. En Puerta Real está Burger King, en Reyes Católicos abrió hace unos meses el KFC, situando justo en la Plaza del Carmen, frente al Ayuntamiento, al 'rey del pollo frito', y en unos meses, según adelantó este periódico, la cadena McDonald's vuelve al Centro de Granada con un establecimiento en Gran Vía, frente a la puerta de la Capilla Real. A esto se suma el otro Burger King que abrió en Reyes Católicos, en su segundo tramo hacia Plaza Nueva.

Y hay más establecimientos de comida rápida o para llevar. En Puerta Real el Dunkin Donuts; en Reyes Católicos la cadena de empanadas argentinas Malvon, los bocadillos de ibéricos de Viandas Hacienda Zorita y una próxima tienda automática 24 horas para sacar bebida y snaks de máquina a cualquier hora. En Gran Vía está el Starbuks. A estos establecimientos se suman otros establecimientos de restauración y cafeterías como La Cueva, Rey Fernando y López Mezquita. Y en el segundo tramo de Reyes Católicos, pasado el giro con Gran Vía y en dirección Plaza Nueva, todo son negocios de hostelería con cadenas como Los Manueles, Carmela, pastelería Ysla y negocios de shawarma. Y heladerías, que también se concentran en estas calles con Los Italianos o Helados La Abuela, además de las tiendas de chucherías gigantes (Dulces Pecados), que proliferan últimamente por el Centro de la ciudad. Y un Carrefour express, también para dar servicio a los pisos turísticos. Una tendencia que podría responder también a los elevados precios de los alquileres en esa zona, donde pequeños negocios no pueden permitírselo y sí grandes cadenas: la última en aterrizar, la perfumería Druni, en el antiguo edificio de Zara.

En cambio, las tiendas más tradicionales sobreviven como pueden. Quedan históricas como la platería Miguel Moreno, joyerías y alguna firma de ropa aunque estas abren y cierran con más 'alegría' y a las que se sumará también en breve la tienda del Granada CF, que se traslada del estadio al Centro, precisamente pensando en favorecer al turista la venta de artículos de este deporte, cuando adapte la obra a los requerimientos de urbanismo.

Locales vacíos y pisos

Y quedan también locales vacíos. Los más destacados son el de la antigua tienda de H&M y el de la mítica tienda de telas La Villa, edificio que está vacío y deteriorado. También se ha quedado vacío el local de Bimba y Lola tras abrir la nueva tienda en Recogidas, y hay otros dos locales más pequeños cerrados en Reyes Católicos.

En cuanto a los pisos, se han convertido en calles de oficinas y los vecinos que realmente viven allí se cuenta con los dedos de la mano. Y los nuevos proyectos no van a afianzar a los residentes sino al turismo. Así, en Gran Vía ya se anuncia la rehabilitación y cambio de uso de un edificio para apartamentos turísticos. Es el edificio que precisamente hay junto al futuro McDonald's, que irá donde había un Puerta Bernina y una sede bancaria que también ha desaparecido, al lado de la parada de autobús en la misma acera de Los Italianos.

También hay otro edificio en Reyes Católicos, esquina con el Corral del Carbón, que se convertirá en uso hotelero y turístico, según el cartel de obra que cuelga desde hace unos meses. Y en ese eje también está el proyecto de hotel en el edificio de Cortefiel que fue adquirido por Tomás Olivo y el que abrirá de cinco estrellas en la antigua banca de los Rodríguez Acosta, frente a la Catedral.

En definitiva, un eje que se adapta al turista más que al granadino y al que se suman también el resto de calles de entorno o la propia Plaza Bib-Rambla.